Eliseo se volvió, se les quedó mirando y los maldijo invocando al Señor. Entonces salieron de la espesura dos osas que despedazaron a cuarenta y dos de aquellos niños.
Levítico 26:6 - Nueva Biblia Española (1975) Pondré paz en el país y dormirán sin alarmas. Descastaré las fieras y la espada no cruzará su país. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y yo daré paz en la tierra, y dormiréis, y no habrá quien os espante; y haré quitar de vuestra tierra las malas bestias, y la espada no pasará por vuestro país. Biblia Nueva Traducción Viviente »Les daré paz en la tierra y podrán dormir sin temor alguno. Libraré la tierra de animales salvajes y mantendré a sus enemigos fuera del país. Biblia Católica (Latinoamericana) Yo estableceré la paz en su país y dormirán sin que nadie los moleste; haré desaparecer del país los animales feroces, y la espada no pasará por su tierra. La Biblia Textual 3a Edicion Porque Yo estableceré la paz en vuestra tierra y os acostaréis sin que nadie os espante. Haré también desaparecer de vuestra tierra las bestias feroces y la espada no pasará por vuestro país. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Daré paz a la tierra, y dormiréis sin que nadie os inquiete. Haré desaparecer del país las bestias dañinas y no pasará por vuestra tierra la espada. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y yo daré paz en la tierra, y dormiréis, y no habrá quien os espante; y quitaré de vuestra tierra las malas bestias, y la espada no pasará por vuestro país. |
Eliseo se volvió, se les quedó mirando y los maldijo invocando al Señor. Entonces salieron de la espesura dos osas que despedazaron a cuarenta y dos de aquellos niños.
Pero tendrás un hijo que será un hombre pacífico y le haré vivir en paz con todos los enemigos de alrededor. Su nombre será Salomón, y en sus días concederé paz y tranquilidad a Israel.
El reino de Josafat gozó de calma y su Dios le concedió paz con sus vecinos.
harás pacto con los espíritus del campo y tendrás paz con las fieras,
y nuestros bueyes vengan cargados; que no haya brechas ni aberturas ni alarma en nuestras plazas.
El Señor da fuerza a su pueblo, el Señor bendice a su pueblo con la paz.
En cambio, a mí, Señor, me has infundido más alegría que cuando abundan el trigo y el vino.
Voy a escuchar lo que dice el Señor: 'Dios anuncia la paz a su pueblo y a sus adictos, a los que recobran la esperanza'.
Pero no los echaré a todos en un año, no vaya a quedar desierta la tierra y se multipliquen las fieras.
cuando camines, te guiarán; cuando descanses, te guardarán; cuando despiertes, te hablarán;
Lo cruzará una calzada que llamarán Vía Sacra, no pasará por ella el impuro, los inexpertos no se extraviarán.
No habrá por allí leones, no se acercarán bestias feroces, sino que caminarán los redimidos
artífice de la luz, creador de las tinieblas, autor de la paz, creador de la desgracia; yo, el Señor, hago todo esto.
Y tú, siervo mío, Jacob, no temas; no te asustes, Israel -oráculo del Señor- , que yo te salvaré del país remoto y a tu descendencia del destierro; Jacob volverá y descansará, reposará sin alarmas,
Si suelto por el país fieras salvajes que lo dejen sin hijos, para que quede devastado y sin nadie que lo transite, por miedo a las fieras,
Si mando la espada contra ese país, si ordeno a la espada que atraviese el país y extirpo de él hombres y animales,
Pues así dice el Señor: ¡Cuánto más cuando yo mande mis cuatro fatídicas plagas: la espada, el hambre, las fieras salvajes y la peste, contra Jerusalén para extirpar de ella hombres y animales!
Haré con ellos alianza de paz: descastaré de la tierra los animales dañinos; acamparán seguros en el desierto, dormirán en los bosques.
El árbol silvestre dará su fruto y la tierra dará sus cosechas, y ellos estarán seguros en su territorio. Sabrán que yo soy el Señor cuando haga saltar las coyundas de su yugo y los libre del poder de los tiranos.
Mandaré contra ustedes hambre y fieras salvajes que les dejarán sin hijos; pasarán por ti peste y matanza y mandaré contra ti la espada. Yo, el Señor, lo he dicho.
Aquel día haré para ellos una alianza con las fieras salvajes, con las aves del cielo y los reptiles de la tierra. Arco y espada y armas romperé en el país, y los haré dormir tranquilos.
Cumplan mis leyes y guarden mis mandatos poniéndolos por obra y habitarán tranquilos en la tierra.
La tierra dará sus frutos, comerán hasta saciarse y habitarán tranquilos.
Soltaré contra ustedes fieras salvajes que los dejarán sin hijos, destrozarán sus ganados, los diezmarán y asolarán sus caminos.
Esgrimiré contra ustedes la espada vengadora de mi pacto y se refugiarán en sus ciudades. Les mandaré entonces la peste, y se rendirán a sus enemigos.
Perseguirán a sus enemigos, que caerán ante ustedes a filo de espada.
Se sentará cada uno bajo su parra y su higuera, sin sobresaltos -lo ha dicho el Señor de los ejércitos-.
un resto de Israel que se acogerá al Señor, que no cometerá crímenes ni dirá mentiras ni tendrá en la boca una lengua embustera. Pastarán y se tenderán sin que nadie los espante.
La gloria de este segundo templo será mayor que la del primero -dice el Señor de los ejércitos-. En este sitio daré la paz -oráculo del Señor- de los ejércitos-.
Destruirá los carros de Efraín y los caballos de Jerusalén; destruirá los arcos de guerra y dictará paz a las naciones; dominará de mar a mar, del Gran Río al confín de la tierra.
'Paz' es mi despedida;' paz les deseo, la mía; pero yo no me despido como se despide todo el mundo. No estén intranquilos ni tengan miedo,
La noche antes de que lo sacara Herodes, estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, atado con dos cadenas, y centinelas hacían guardia a la puerta de la cárcel.
Según lo dicho, rehabilitados ahora por la fe, estarnos en paz con Dios por obra de nuestro Señor Jesús Mesías,