Salmos 3 - Nueva Biblia Española (1975)1 ¡Dichosos los que se refugian en él! 2 Señor, cuántos son mis enemigos, cuántos se levantan contra mí, 3 cuántos dicen de mí: 'Ya no lo protege Dios'. 4 Pero tú, Señor, eres mi escudo y mi gloria, tú mantienes alta mi cabeza. 5 Si grito invocando al Señor, él me escucha desde su monte santo; 6 puedo acostarme y dormir y despertar: el Señor me sostiene. 7 No temeré al ejército innumerable que acampa a mi alrededor. 8 Levántate, Señor; sálvame, Dios mío; tú abofeteaste a mis enemigos, rompiste los dientes de los malvados. |
Luis Alonso Schökel y Juan Mateos, 1975 ©, Editada por Ediciones Cristiandad.