El que reciba a uno de ustedes, a mí me recibe, y el que me reciba a mí, recibe al que me envió.
Mateo 25:40 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Y contestando el rey, dijo: “En verdad les digo, en la medida que lo hicieron a uno de mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicieron”. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que en cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. Biblia Nueva Traducción Viviente »Y el Rey dirá: “Les digo la verdad, cuando hicieron alguna de estas cosas al más insignificante de estos, mis hermanos, ¡me lo hicieron a mí!”. Biblia Católica (Latinoamericana) El Rey responderá: 'En verdad les digo que, cuando lo hicieron con alguno de los más pequeños de estos mis hermanos, me lo hicieron a mí. La Biblia Textual 3a Edicion Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo, en cuanto lo hicisteis a uno de éstos, mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicisteis. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y el rey les responderá: 'Os lo aseguro: todo lo que hicisteis con uno de estos hermanos más pequeños, conmigo lo hicisteis'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo: En cuanto lo hicisteis a uno de estos mis hermanos más pequeños, a mí lo hicisteis. |
El que reciba a uno de ustedes, a mí me recibe, y el que me reciba a mí, recibe al que me envió.
Y cualquiera que dé de beber un vaso de agua a uno de mis discípulos, aunque se trate del más pequeño, en verdad les digo, tendrá una recompensa que no la perderá.
¡Cuidado! No menosprecien a ninguno de estos pequeños, porque ellos tienen ángeles que siempre los cuidan desde el cielo.
Entonces el rey dirá a los que están a su derecha: “Vengan benditos de mi Padre, hereden el reino que había sido preparado para ustedes antes de la fundación del mundo.
Entonces el rey responderá: “En verdad les digo, en la medida en que no ayudaron a uno de mis hermanos más pequeños, es como si no me hubieran ayudado a mí”.
Entonces Jesús les dijo: – No teman; corran, anuncien a mis hermanos que vayan a Galilea y allí me verán.
Cualquiera que les dé un vaso de agua, en mi nombre, ya que ustedes son de Cristo, en verdad les digo que esta persona tendrá una recompensa.
diciendo: – ¡Bendito el Rey que viene en el nombre del Señor!. ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!
Jesús dijo: – No me toques, porque aún no he subido al Padre; pero anda donde mis hermanos y diles que subo a mi Padre, quien es padre de ustedes, y a mi Dios, quien es Dios de ustedes.
Porque Dios siempre supo lo que estaba haciendo, Él decidió desde el principio llamar a los que lo aman a ser transformados según la imagen de su Hijo, para que Él sea el primogénito entre muchos hermanos.
Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor; por amor a Jesús, nos ponemos al servicio de ustedes.
Hermanos, Dios los llamó a ustedes a ser libres, pero no quiero que mal entiendan la libertad y se vuelvan libertinos, sino que vivan la libertad practicando el amor sacrificial, ayudándose unos a otros.
En cambio, el fruto del Espíritu es: amor sacrificial: alegría, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe por identidad,
Pues en Cristo Jesús, ni la circuncisión ni la incircuncisión significan algo, lo que importa es la fe por identidad que se expresa en la práctica del amor sacrificial.
Porque Dios no es injusto para olvidarse de lo mucho que ustedes han trabajado, y también que practicaron el amor sacrificial y el servicio a los santos hasta el día de hoy.
Sus almas han sido purificadas como resultado de una obediencia a la verdad, por eso ámense los unos a los otros fraternal y sinceramente, practicando el verdadero amor sacrificial entre ustedes, al estilo de Dios en Cristo;
Si alguien dice que ama a Dios y odia al prójimo, es un gran mentiroso; porque el que no ama a su prójimo a quien ve, ¿cómo puede amar a Dios a quien nunca ha visto?
pelearán contra el Cordero, pero el Cordero los vencerá porque Él es Señor de señores y Rey de reyes; Él los vencerá, y también hará vencedores a los que están con Él, quienes son llamados, convocados y fieles.
Y tiene un nombre que ha sido escrito en su ropa y en su muslo: “REY DE REYES Y SEÑOR DE SEÑORES”.