Cuando nació Jesús en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes el Grande, unos sabios vinieron del oriente a Jerusalén,
Hechos 11:1 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Los apóstoles y los hermanos que estaban en Judea, escucharon que los no judíos también recibieron la Palabra de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Oyeron los apóstoles y los hermanos que estaban en Judea, que también los gentiles habían recibido la palabra de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente La noticia de que los gentiles habían recibido la palabra de Dios pronto llegó a los apóstoles y a los demás creyentes de Judea. Biblia Católica (Latinoamericana) Los apóstoles y los hermanos de Judea tuvieron noticias de que también personas no judías habían acogido la Palabra de Dios. Por eso, La Biblia Textual 3a Edicion Los apóstoles y los hermanos que estaban° en Judea oyeron entonces que también los gentiles habían recibido° la palabra de Dios; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Oyeron los apóstoles y los hermanos que vivían en Judea que también los gentiles habían recibido la palabra de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los apóstoles y los hermanos que estaban en Judea, oyeron que también los gentiles habían recibido la palabra de Dios. |
Cuando nació Jesús en Belén de Judea, bajo el reinado de Herodes el Grande, unos sabios vinieron del oriente a Jerusalén,
Les digo a ustedes que muchas personas vendrán de oriente y occidente para sentarse a la mesa con Abraham, Isaac y Jacob en el reino de los cielos.
Cuando entraron a la tumba, vieron a un joven sentado a la derecha, vestido con una ropa blanca; y ellas se asustaron.
que será luz para revelación a los gentiles, y traerá honor a tu pueblo Israel”.
El grupo de personas reunidas era de unas ciento veinte. En esos días, Pedro se puso de pie en medio de los hermanos y dijo:
Los discípulos de Antioquía se pusieron de acuerdo para ayudar a los cristianos en la región de Judea y cada uno dio todo lo que pudo dar;
Cuando llegaron, reunieron a la iglesia y contaron todo lo que Dios hizo a través de ellos, y cómo había abierto la puerta de la fe a los que no son judíos.
Por tal razón ellos prepararon el viaje, apoyados por la iglesia de Antioquía; pasaron por Fenicia y también por Samaria, contando detalles sobre la conversión de los no judíos y esto causaba gran alegría a todos los hermanos en cada lugar.
Los hermanos de Roma habiéndose enterado de nuestra situación, salieron hasta el Foro de Apio y las Tres Tabernas a recibirnos. Al verlos, Pablo dio gracias a Dios y cobró ánimo.