y por eso le dijo: 'Ya que me has hecho esta petición, y no has pedido para ti una vida larga, ni has pedido riquezas, ni has pedido la muerte de tus enemigos, sino que me has pedido sabiduría para gobernar con justicia,
1 Timoteo 2:8 - Biblia Martin Nieto Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar levantando sus manos limpias, sin ira ni rencores. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda. Biblia Nueva Traducción Viviente Deseo que en cada lugar de adoración los hombres oren con manos santas, levantadas a Dios, y libres de enojo y controversia. Biblia Católica (Latinoamericana) Quiero, pues, que en todo lugar donde los hombres estén orando levanten al cielo manos limpias de todo enojo y discusión. La Biblia Textual 3a Edicion Quiero pues que los varones oren° en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar levantando sus manos piadosas, sin ira ni altercados. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda. |
y por eso le dijo: 'Ya que me has hecho esta petición, y no has pedido para ti una vida larga, ni has pedido riquezas, ni has pedido la muerte de tus enemigos, sino que me has pedido sabiduría para gobernar con justicia,
que mi oración sea como incienso en tu presencia, y mis manos alzadas, la ofrenda de la tarde.
El hombre de manos inocentes y limpio corazón, que no entrega su alma a la mentira y nunca jura en falso.
Lavo mis manos en señal de inocencia, para dar vueltas en torno a tu altar
Escucha mi grito suplicante cuando te pido auxilio, cuando alzo mis manos hacia tu templo santo.
Mas yo, cuando estaban enfermos, vestía de sayal, maceraba mi cuerpo con ayunos y estaba siempre orando interiormente.
Si hubiera alguna culpa en mi conciencia, el Señor no me habría escuchado;
El sacrificio del injusto es un sacrilegio, pues lo ofrece con malas intenciones.
Cuando extendéis las manos, aparto mis ojos de vosotros; aunque multipliquéis vuestras plegarias, no las escucho. Vuestras manos están llenas de sangre.
Jesús les respondió: 'Os aseguro que si tuvierais fe y no dudarais, no sólo haríais lo de la higuera, sino que si decís a este monte: Quítate de ahí y échate al mar, así se hará.
Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen,
perdona nuestras ofensas como también nosotros perdonamos a los que nos ofenden,
Jesús decía: 'Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen'. Y se repartieron sus vestidos a suertes.
Jesús le dijo: 'Créeme, mujer: se acerca la hora en que ni en este monte ni en Jerusalén adoraréis al Padre.
Piadoso y temeroso de Dios, con toda su casa, hacía muchas limosnas al pueblo y oraba continuamente a Dios.
y me dijo: Cornelio, Dios ha escuchado tu oración y tiene presente tus limosnas.
Y él, mirándolo fijamente y atemorizado, dijo: '¿Qué pasa, Señor?'. Y le dijo: 'Tus oraciones y tus limosnas han subido a la presencia de Dios, que se ha acordado de ti.
Pero, al pasar la semana, partimos. Nos acompañaron todos, con sus mujeres y niños, hasta fuera de la ciudad. Nos pusimos de rodillas en la playa, oramos,
Y puesto de rodillas, gritó con fuerte voz: 'Señor, no les tengas en cuenta este pecado'. Y diciendo esto, expiró. Saulo aprobaba este asesinato.
a la Iglesia de Dios que está en Corinto, a los consagrados por Cristo Jesús, llamados y consagrados, con todos los que invocan en cualquier lugar el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro;
Pues yo quisiera que todos los hombres fuesen como yo; pero cada uno tiene de Dios su propio don: unos de una manera, otros de otra.
Gracias sean dadas a Dios, que siempre nos hace triunfar en Cristo y descubre en todo lugar, mediante nosotros, la fragancia de su conocimiento.
Hermanos, quiero que sepáis que las cosas que me han ocurrido han venido a favorecer el progreso del evangelio,
Así es como desde vosotros se ha difundido la palabra del Señor; y no solamente en Macedonia y en Acaya, sino por doquier es conocida vuestra fe en Dios, de suerte que no tenemos necesidad de hablar de ella.
Por eso quiero que las viudas jóvenes se vuelvan a casar, que tengan hijos, que gobiernen su casa y que no den motivos de crítica a los adversarios,
Esta doctrina es digna de crédito; quiero que inculques constantemente estas cosas, para que los que han creído en Dios sobresalgan en buenas obras. Estas cosas son buenas y útiles para los hombres.
acerquémonos con un corazón sincero, con fe perfecta, purificados los corazones de toda mancha de la que tengamos conciencia, y el cuerpo lavado con agua pura.
acercaos a Dios, y se acercará a vosotros; lavaos las manos, pecadores, purificad vuestros corazones, gentes de alma doble, y reconoced vuestra miseria; llorad y clamad;
Igualmente, vosotros, maridos, comportaos sabiamente con vuestras esposas, como con un sexo más débil. Puesto que son herederas, con el mismo título que vosotros, del don de la vida sed respetuosos con ellas para que vuestras oraciones no encuentren obstáculos.