VERSÍCULOS DE ALIENTO

La vida es una sucesión de altibajos, emocionales, sin embargo Dios nos llama a ser como los árboles plantados junto a un río, cuya estabilidad permite que sus hojas no caigan sin importar las inclemencias el tiempo. Cuando pasamos por momentos de desánimo y aflicción, sentimos que nunca podremos salir de allí. Afortunadamente, Dios en su infinita misericordia, siempre trae palabras de aliento, su palabra nos ayudan a levantarnos, solo debemos tener un corazón dispuesto a Él y pronto pasaremos esos momentos difíciles. Dios está contigo no estás solo, Dios sanará todas tus heridas y te llenará de gozo. Esperamos en Cristo que puedas sentir ese refrigerio necesario del espíritu Santo en tu vida, y oramos para que Dios aliente tu corazón y vivifique tus fuerzas.

Oración

¡Dios Todopoderoso! Solo tú eres Digno de toda suprema alabanza y adoración. Te pido por medio de mi Señor Jesucristo que renueves mis fuerzas, me he sentido agotado y sin ánimos para seguir. Siento en ocasiones que debo renunciar y por eso ruego que derrames favor y gracia sobre mi vida para que prosiga hacia la meta sin detenerme. Tu palabra dice: «Misericordia mía y mi castillo, Fortaleza mía y mi libertador, Escudo mío, en quien he confiado; El que sujeta a mi pueblo debajo de mí». Aunque el estrés del trabajo y el hogar me quieran abrumar aún he de alabarte Señor y esperaré en ti porque vendrás a socorrerme. Ayúdame Espíritu Santo a correr hacia Jesús sin cansancio ni quejas. Deseo ser esforzado y valiente, pero necesito que me sustentes y seas mi fuerza Señor. Proclamo en este día que Dios es mi escudo y mi Señor, tú eres mi roca, mi defensor, mi libertador, tú eres mi fuerza y mi escudo, mi poderosa salvación, mi alto refugio y, por lo tanto, no seré derribado ni conmovido de la roca que es Cristo. Purifícame y límpiame Señor, toma control y dominio de mis emociones, pensamientos y de cada área de mi vida, concédeme tu gozo y tu paz. En el nombre de Jesús. ¡Amén!