Luego, Jesús le dijo: – No digas a nadie lo que pasó, mejor ve donde el sacerdote y presenta la ofrenda que ordenó Moisés, para testificar a ellos lo que Dios hizo en tu vida.
Marcos 1:44 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia – Mira, no digas a nadie que te sané, sino vete y preséntate ante el sacerdote y lleva tu ofrenda de adoración a Dios por tu limpieza, para que se cumpla con lo que Moisés ordenó, eso servirá de testimonio a los demás judíos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y le dijo: Mira, no digas a nadie nada, sino ve, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu purificación lo que Moisés mandó, para testimonio a ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente —No se lo cuentes a nadie. En cambio, preséntate ante el sacerdote y deja que te examine. Lleva contigo la ofrenda que exige la ley de Moisés a los que son sanados de lepra. Esto será un testimonio público de que has quedado limpio. Biblia Católica (Latinoamericana) No cuentes esto a nadie, pero vete y preséntate al sacerdote y haz por tu purificación la ofrenda que ordena la Ley de Moisés, pues tú tienes que hacer tu declaración.
Pero el hombre, en cuanto se fue, empezó a hablar y a divulgar lo ocurrido, La Biblia Textual 3a Edicion Mira, a nadie le digas nada,° sino ve, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu limpieza lo que Moisés ordenó,° para testimonio a ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 'Cuidado con decirle nada a nadie. Eso sí: ve a presentarte al sacerdote y a ofrecer por tu purificación lo que mandó Moisés, para que tengan constancia de ello'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y le dijo: Mira, no digas a nadie nada, sino ve, muéstrate al sacerdote, y ofrece por tu limpieza lo que Moisés mandó, para testimonio a ellos. |
Luego, Jesús le dijo: – No digas a nadie lo que pasó, mejor ve donde el sacerdote y presenta la ofrenda que ordenó Moisés, para testificar a ellos lo que Dios hizo en tu vida.
Jesús los vio, y dijo: – Vayan y preséntense ante los sacerdotes; y mientras se iban, quedaron sanos.
Y Jesús le pidió al hombre sanado de la lepra, que no le contara a nadie este milagro, más bien, le dijo que fuera donde el sacerdote y diera una ofrenda por la purificación de su cuerpo, conforme a la ley de Moisés, para que su sanidad sirviera de testimonio a los demás.
Entonces el comandante despidió al sobrino de Pablo y le advirtió que no divulgase nada a nadie de lo que él le informó.
De hecho, todo lo que se escribió en el pasado se escribió para enseñarnos, a fin de que animados y consolados por las Escrituras, perseveremos en mantener nuestra esperanza.
Todo eso sucedió para servirnos de ejemplo, y fue escrito como advertencia para nosotros que vivimos en los últimos tiempos.