diciendo: – ¿Dónde está el niño que nació y será el rey de los judíos? Porque hemos visto una estrella en el oriente que nos condujo hasta acá, y hemos venido para adorarlo.
Lucas 19:38 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia diciendo: – ¡Bendito el Rey que viene en el nombre del Señor!. ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 diciendo: ¡Bendito el rey que viene en el nombre del Señor; paz en el cielo, y gloria en las alturas! Biblia Nueva Traducción Viviente «¡Bendiciones al Rey que viene en el nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en el cielo más alto!». Biblia Católica (Latinoamericana) Decían: '¡Bendito el que viene como Rey en nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en lo más alto de los cielos!' La Biblia Textual 3a Edicion diciendo: ¡Bendito el rey que viene en el nombre del Señor!° ¡Paz en el cielo, y gloria en las alturas! Biblia Serafín de Ausejo 1975 y exclamaban: '¡Bendito el que viene, el rey, en el nombre del Señor! ¡Paz en el cielo y gloria en las alturas!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) diciendo: ¡Bendito el Rey que viene en el nombre del Señor; paz en el cielo, y gloria en las alturas! |
diciendo: – ¿Dónde está el niño que nació y será el rey de los judíos? Porque hemos visto una estrella en el oriente que nos condujo hasta acá, y hemos venido para adorarlo.
La gente que iba adelante, y los otros que seguían detrás de Jesús, gritaban: “¡Hosanna al Hijo de David! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor! ¡Hosanna en las alturas!”.
Entonces el rey dirá a los que están a su derecha: “Vengan benditos de mi Padre, hereden el reino que había sido preparado para ustedes antes de la fundación del mundo.
Y contestando el rey, dijo: “En verdad les digo, en la medida que lo hicieron a uno de mis hermanos más pequeños, a mí me lo hicieron”.
Por eso les digo, su templo quedará abandonado; y les digo también que no me verán más hasta que digan: – Bendito el que viene en nombre del Señor.
Como resultado de la justificación por la fe, estamos en paz con Dios, por medio de nuestro Señor Jesucristo;
a fin de que nosotros, los que primeramente hemos puesto nuestra esperanza en Cristo, seamos alabanza de su gloria.
para su alabanza y su gloria. Y por su gracia nos colmó de muchos favores con el propósito de dignificarnos en su Hijo amado,
para que la creativa sabiduría de Dios se revele ahora, por medio de la Iglesia, hasta a los principados y potestades en las regiones celestiales.
¡A Dios sea la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús, por todas las generaciones y eternamente, amén!
por medio de Cristo todas las cosas que están en la tierra y las que están en los cielos fueron reconciliadas con Dios, estableciendo la paz, a través de la sangre derramada en la cruz.
Al Rey de la eternidad, Santo, Invisible y Auténtico Dios: honor y gloria por siglos de siglos; así sea.
A los cuales se les manifestaron todas estas cosas, pero no para ellos sino para ustedes. Ellos solamente profetizaron en su tiempo lo que ustedes iban a vivir y estas cosas han sido anunciadas a través de la predicación del Evangelio, que es garantizada por el Espíritu Santo enviado desde el cielo y los mismos ángeles anhelaban profundamente ser parte de esta historia de salvación.