conforme nos transmitieron los que fueron testigos oculares, desde el principio, y dedicaron sus vidas a ser proclamadores de esta palabra que transforma vidas.
Hechos 16:6 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Pasaron por Frigia y por la región de Galacia; porque el Espíritu Santo les impidió predicar la Palabra en Asia; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y atravesando Frigia y la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo hablar la palabra en Asia; Biblia Nueva Traducción Viviente Luego, Pablo y Silas viajaron por la región de Frigia y Galacia, porque el Espíritu Santo les había impedido que predicaran la palabra en la provincia de Asia en ese tiempo. Biblia Católica (Latinoamericana) Atravesaron Frigia y la región de Galacia, pues el Espíritu Santo no les dejó que fueran a predicar la Palabra en Asia. La Biblia Textual 3a Edicion Y viajaron a través de la región de Frigia y Galacia, pues el Espíritu Santo les impidió hablar la palabra en Asia.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Habiéndoles impedido el Espíritu Santo predicar la palabra en Asia, cruzaron Frigia y la región de Galacia, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y pasando a Frigia y a la provincia de Galacia, les fue prohibido por el Espíritu Santo predicar la palabra en Asia. |
conforme nos transmitieron los que fueron testigos oculares, desde el principio, y dedicaron sus vidas a ser proclamadores de esta palabra que transforma vidas.
Pedro seguía reflexionando sobre la visión y el Espíritu le dijo: – Mira, unos hombres te buscan.
Y el Espíritu me dijo que los acompañara sin dudar. También fueron conmigo estos seis hermanos y entramos en la casa de Cornelio;
y cuando llegaron a la frontera de Misia, trataron de ir a Bitinia, pero el Espíritu de Jesús no se los permitió.
Pasó algún tiempo en Antioquía y luego emprendió otro viaje, atravesando por orden la región de Galacia y de Frigia, consolidando a todos los discípulos.
Esto sucedió por dos años, de modo que todos los habitantes de Asia escucharon la Palabra del Señor, tanto judíos como griegos.
Porque Pablo había decidido pasar de largo a Éfeso para no demorarse en Asia, hacía todo lo posible por apurarse y llegar a Jerusalén para celebrar la fiesta de Pentecostés.
Ustedes deben cuidarse a sí mismos y cuidar al rebaño, ya que el Espíritu Santo les dio la responsabilidad de pastorear la iglesia de Dios, la cual compró con la sangre de su propio Hijo.
Lo acompañaron Sópater hijo de Pirro, de Berea; Aristarco y Segundo, de Tesalónica; Gayo, de Derbe; Timoteo; Tíquico y Trófimo, de Asia.
Cuando iban a cumplirse los siete días, algunos judíos de Asia vieron a Pablo en el templo e incitaron a toda la multitud, lo agarraron,
Sin embargo, algunos judíos se pusieron a discutir con Esteban en la Sinagoga de los Hombres Libres, que eran del pueblo de Cirene, de la ciudad de Alejandría, de la región de Cilicia y de la provincia de Asia;
Y el Espíritu dijo a Felipe: – Acércate al carruaje y camina junto a él.
Saluden igualmente a la iglesia que se reúne en la casa de ellos. Saluden a mi querido amigo Epéneto, que en la provincia de Asia fue el primero en aceptar a Cristo como su salvador.
Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien distribuye a cada uno como Él quiere.
Con relación a la ofrenda para los hermanos en Cristo, quiero que sigan las mismas instrucciones que di a los hermanos de las iglesias de Galacia:
Las iglesias de la provincia de Asia les mandan saludos. Áquila y Priscila los saludan cordialmente en el Señor, como también la iglesia que se reúne en la casa de ellos.
Queridos hermanos, no queremos que desconozcan las crisis que sufrimos en la provincia de Asia. Estábamos bajo tanta presión y el sufrimiento fue tan fuerte que hasta perdimos la esperanza de seguir viviendo;
Todos los hermanos que están conmigo también les envían saludos a las iglesias de Galacia:
¡Oh gálatas, qué tontos son ustedes! ¿Quién los hechizó? A ustedes les fue dada una explicación muy clara de cómo Jesucristo fue crucificado.
Ya sabes esto querido amigo, que los que están en Asia Menor me abandonaron, incluso Figelo y Hermógenes.
porque Demas me ha abandonado, se enamoró de este mundo y se fue a Tesalónica. Crescente se fue a Galacia y Tito a Dalmacia.
Por la fe, Abraham dijo sí al llamado de Dios, y partió a una tierra que iba a recibir como herencia, salió sin saber ni siquiera dónde quedaba ese lugar.
Pedro, apóstol de Jesucristo, me dirijo a los llamados por Dios que son refugiados por las persecuciones y dispersos en diferentes regiones, como en el Ponto, Galacia, Capadocia, Bitinia y toda Asia,
que decía: – Escribe en un libro lo que ves y envíalo a las siete iglesias: a Éfeso, Esmirna, Pérgamo, Tiatira, Sardis, Filadelfia y Laodicea.
Cordial saludo de Juan, a las siete iglesias que están en Asia: que la gracia, que es vivir la vida de Dios en Cristo Jesús, y la paz, que se fundamenta en la justicia, sean parte de la naturaleza cristiana de ustedes; de parte de Aquel que es, que era y que está viniendo; de parte de los siete espíritus que están ante su trono;