Mateo 5:10 - Biblia Martin Nieto Dichosos los perseguidos por ser justos, porque de ellos es el reino de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Biblia Nueva Traducción Viviente Dios bendice a los que son perseguidos por hacer lo correcto, porque el reino del cielo les pertenece. Biblia Católica (Latinoamericana) Felices los que son perseguidos por causa del bien, porque de ellos es el Reino de los Cielos. La Biblia Textual 3a Edicion Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia,° porque de ellos es el reino de los cielos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Bienaventurados los perseguidos por atenerse a lo que es justo, porque de ellos es el reino de los cielos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia; porque de ellos es el reino del cielo. |
Escuchad la palabra del Señor los que tembláis a su palabra: Han dicho vuestros hermanos que os odian, que os aborrecen a causa de mi nombre. ¡Que el Señor manifieste su gloria para que podamos ver vuestra alegría! Pero ellos serán avergonzados.
Cuando os persigan en una ciudad, huid a otra; y si también en ésta os persiguen, huid a otra. Os aseguro que no se acabarán las ciudades de Israel hasta que venga el hijo del hombre'.
pero Jesús dijo: 'Dejad que los niños se acerquen a mí y no se lo impidáis, porque de los que son como ellos es el reino de Dios'.
Entonces el rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, tomad posesión del reino preparado para vosotros desde el principio del mundo.
'Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de Dios.
Pero Jesús, al verlo, se indignó y les dijo: 'Dejad que los niños se acerquen a mí; no se lo impidáis, porque de los que son como ellos es el reino de Dios.
que no reciba el ciento por uno ya en este mundo, en casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y tierras, con persecuciones, y en el siglo venidero, la vida eterna.
Pero antes de todo esto, os echarán mano, os perseguirán, os llevarán a las sinagogas y a las cárceles y os harán comparecer ante los reyes y los gobernadores por causa mía.
Entonces Jesús, levantando los ojos hacia sus discípulos, comenzó a decir: 'Dichosos los pobres, porque vuestro es el reino de Dios.
Dichosos seréis si os odian los hombres, si os expulsan, os insultan y proscriben vuestro nombre como infame por causa del hijo del hombre.
Recordad que os he dicho: 'El criado no es más que su amo'. Si a mí me han perseguido, también os perseguirán a vosotros; y si han rechazado mi doctrina, también rechazarán la vuestra.
Llamaron a los apóstoles, los azotaron, les prohibieron terminantemente hablar más de Jesús y los soltaron.
Aquel día se desencadenó una gran persecución contra la Iglesia de Jerusalén; y todos, excepto los apóstoles, se dispersaron por las regiones de Judea y Samaría.
Pues el peso momentáneo y ligero de nuestras penalidades produce, sobre toda medida, un peso eterno de gloria
sin dejaros intimidar en lo más mínimo ante vuestros adversarios; lo que para ellos es señal de perdición, lo es en cambio para vosotros de salvación, y esto por obra de Dios.
si sufrimos con él, también reinaremos con él; si le negamos, él nos negará a nosotros;
en las persecuciones y en los sufrimientos que me sobrevinieron en Antioquía, en Iconio, en Listra, donde tantas penalidades tuve que sufrir; pero de todas ellas me libró el Señor.
dichoso el hombre que soporta la prueba; porque si la ha superado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a los que le aman.
Mirad cómo tenemos por dichosos a los que fueron pacientes. Habéis oído la paciencia de Job y habéis visto el designio del Señor, porque el Señor es compasivo y misericordioso.
no como Caín, que era del maligno y mató a su hermano. Y ¿por qué lo mató? Porque sus obras eran malas, y las de su hermano justas.
No te acobardes ante lo que vas a sufrir. El diablo va a encarcelar a algunos de vosotros; es para poneros a prueba; sufriréis una prueba de diez días. Sé fiel hasta la muerte, y te daré la corona de la vida.