Mientras estaba asediado, el rey Acaz aumentó sus pecados contra el Señor.
Jeremías 2:25 - Biblia Martin Nieto Ten cuidado, no se descalce tu pie y se seque tu garganta. Pero tú dices: '¡Déjame en paz; yo amo a extranjeros y tras ellos quiero irme!'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Guarda tus pies de andar descalzos, y tu garganta de la sed. Mas dijiste: No hay remedio en ninguna manera, porque a extraños he amado, y tras ellos he de ir. Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Cuándo dejarás de correr? ¿Cuándo desistirás de jadear tras otros dioses? Pero tú dices: “Ahórrate tus palabras. ¡Estoy enamorada de estos dioses ajenos, y no puedo dejar de amarlos!”. Biblia Católica (Latinoamericana) El que la busca sabe dónde encontrarla. Pero tú dices: '¡No, déjame!, a mí me gustan los extranjeros y tras ellos quiero ir. La Biblia Textual 3a Edicion Guarda tu pie de andar descalzo, Y tu garganta de la sed; Pero dijiste: ¡No hay remedio, no; A extranjeros° he amado, y tras ellos he de ir! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Guarda tu pie de andar descalzo, y tu garganta de la sed. Tú respondes: '¡Es inútil! ¡No! Pues amo a extranjeros y tras ellos quiero ir'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Guarda tus pies de andar descalzos, y tu garganta de la sed. Mas dijiste: No hay esperanza, no; porque amo a los extraños y tras ellos he de ir. |
Mientras estaba asediado, el rey Acaz aumentó sus pecados contra el Señor.
Ofreció sacrificios a los dioses de Damasco, que lo habían derrotado, pues se decía: 'Puesto que los dioses de los reyes de Siria les ayudan, voy a ofrecerles sacrificios para que me ayuden también a mí'. Pero éstos fueron la causa de su ruina y de la de todo Israel.
Sí, tú has rechazado a tu pueblo, a la casa de Jacob; pues está llena de adivinos y de agoreros, como los filisteos, y pacta con extranjeros.
Del largo camino estás cansada, y no dices: Me vuelvo atrás. Has reanudado el vigor de tus fuerzas, por eso no estás exhausta.
¿Qué dirás cuando te visiten como triunfadores aquellos a quienes habías acostumbrado a tus confidencias? ¿No te invadirán dolores como de mujer en parto?
Acaso digas en tu corazón: ¿Por qué me suceden tales desventuras? Por la multitud de tus iniquidades han levantado tus vestidos y has sido violada.
Esto dice el Señor a este pueblo: '¡Cómo les gusta correr de acá para allá; no dan descanso a sus pies! Pero no agradan al Señor. Se acuerda todavía de su iniquidad y castiga sus pecados'.
Pero ellos van a decir: '¡Es inútil, nosotros seguiremos nuestros caprichos y obraremos cada cual según la dureza de nuestro perverso corazón!'.
¡Qué generación la vuestra! Ved lo que dice el Señor: ¿He sido yo un desierto para Israel o una tierra tenebrosa? Pues, ¿por qué dice mi pueblo: 'Nosotros nos vamos, no volveremos más a ti'?
Sube al Líbano y grita, haz resonar tu voz desde Basán, vocifera desde Albarín, porque han sido destrozados todos tus amantes.
Te hablé en la hora de tu prosperidad. Tú dijiste: '¡No quiero escuchar!'. Ése ha sido tu camino desde tu juventud: no escuchar mi voz.
Tan sólo reconoce tu iniquidad: Te has rebelado contra el Señor, tu Dios, has ido a todas partes en pos de extraños y no has escuchado mi voz, dice el Señor.
sino que haremos decididamente todo lo que nos hemos propuesto: quemar incienso y hacer ofrendas de vino a la reina del cielo, tal como hemos hecho nosotros y como hicieron nuestros padres, nuestros reyes y nuestros príncipes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén. Entonces tuvimos pan hasta hartarnos, éramos felices y no veíamos desventuras.
Llora a raudales en la noche y las lágrimas surcan sus mejillas. Nadie hay que la consuele entre todos sus amantes; la han traicionado todos sus aliados, se le han vuelto enemigos.
De sed, la lengua de los niños de pecho se pega al paladar; los pequeños piden pan, no hay quien se lo dé.
Y no sucederá lo que pasa por vuestra mente, cuando andáis diciendo: ¡Seremos como las gentes, como los pueblos de los otros países, adoradores del leño y la piedra!
Diréis a vuestros hermanos: 'Mi-pueblo', y a vuestras hermanas: 'Compadecida'.
De lo contrario, la dejaré desnuda, como el día en que nació; la dejaré como un desierto, la reduciré a tierra seca y la haré morir de sed.
Habéis dicho: 'Es inútil servir a Dios; ¿qué hemos ganado con guardar sus mandamientos o con andar en duelo ante el Señor todopoderoso?
Pero el padre dijo a sus criados: Sacad inmediatamente el traje mejor y ponédselo; poned un anillo en su mano y sandalias en sus pies.
Y gritó: Padre Abrahán, ten compasión de mí y envía a Lázaro para que moje en agua la yema de su dedo y refresque mi lengua, porque me atormentan estas llamas.
Porque en la esperanza fuimos salvados; pero la esperanza que se ve no es esperanza, porque lo que uno ve, ¿cómo puede esperarlo?
tendrás que servir a los enemigos que el Señor mandará contra ti; sufrirás hambre, sed, falta de ropa, miseria total. Cargarán sobre tu cuello yugo de hierro hasta destruirte.
Lo provocaron con dioses extranjeros, / lo irritaron con acciones horribles.