El Señor respondió: 'Si encuentro en Sodoma cincuenta justos dentro de la ciudad, perdonaré a toda la ciudad en consideración a ellos'.
Isaías 1:9 - Biblia Martin Nieto Si el Señor todopoderoso no nos hubiera dejado un residuo, seríamos como Sodoma, iguales a Gomorra. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Si Jehová de los ejércitos no nos hubiese dejado un resto pequeño, como Sodoma fuéramos, y semejantes a Gomorra. Biblia Nueva Traducción Viviente Si el Señor de los Ejércitos Celestiales no hubiera perdonado la vida a unos cuantos entre nosotros, habríamos sido exterminados como Sodoma y destruidos como Gomorra. Biblia Católica (Latinoamericana) ¡Menos mal que Yavé de los Ejércitos
no ha dejado un resto!
Pues por poco nos parecemos a Sodoma
y somos igual que Gomorra. La Biblia Textual 3a Edicion Si YHVH Sebaot no nos hubiera dejado un pequeño remanente, Habríamos llegado a ser como Sodoma, semejantes a Gomorra. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si Yahveh Sebaot no nos hubiera dejado un resto, seríamos como Sodoma, semejantes a Gomorra. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Si Jehová de los ejércitos no nos hubiese dejado un pequeño remanente, seríamos como Sodoma, y semejantes a Gomorra. |
El Señor respondió: 'Si encuentro en Sodoma cincuenta justos dentro de la ciudad, perdonaré a toda la ciudad en consideración a ellos'.
Abrahán volvió a decir: 'No se irrite mi Señor. Voy a hablar por última vez. A lo mejor sólo hay diez'. Y el Señor respondió: 'No la destruiré en consideración a esos diez'.
Entonces el Señor hizo llover sobre Sodoma y Gomorra azufre y fuego del Señor desde el cielo.
Pero yo me reservaré en Israel siete mil: todas las rodillas que no se han doblado ante Baal y todas las bocas que no lo han besado'.
Esperamos que el Señor, tu Dios, haya oído todas las palabras del copero mayor, el que ha sido enviado por el rey de Asiria, su señor, a insultar al Dios vivo, y le castigue por las palabras que el Señor, tu Dios, ha oído. Haz una oración por el resto que aún queda'.
La hija de Sión ha quedado como una choza en una viña, como un tugurio en melonar, como ciudad sitiada.
Aquel día el Señor volverá a alzar su mano para rescatar el resto de su pueblo, lo que quede del destierro de Asiria y de Egipto, de Patrós, de Etiopía, de Elán, de Senaar, de Jamat y de las islas.
habrá un sendero para el resto de su pueblo superviviente de Asiria, como hubo uno para Israel el día que subió de la tierra de Egipto.
que sólo quedan rastrojos; o como cuando se varean las olivas; sólo dos o tres aceitunas en la copa, cuatro o cinco en las ramas del árbol -oráculo del Señor, Dios de Israel-.
Porque sucede en la tierra, entre los pueblos, como en el vareo de la aceituna, como en la rebusca de racimos después de la vendimia.
Por eso la maldición devora la tierra, y sus habitantes sufren los efectos; por eso los habitantes de la tierra se consumen, y sólo quedan unos pocos hombres.
El Señor, tu Dios, habrá oído las palabras del general que el rey de Asiria, su señor, mandó a insultar al Dios vivo, y el Señor, tu Dios, lo castigará. Eleva, pues, una oración por el resto que aún subsiste'.
Escuchadme, casa de Jacob, y todo el resto de la casa de Israel, que habéis sido llevados por mí desde el vientre, sostenidos desde el seno materno.
Si aún quedara una décima parte, será también exterminada igual que el terebinto o la encina, que, al ser talados, conservan un tronco; ese tronco será semilla santa.
Esto dice el Señor: Cuando se encuentra zumo en un racimo se dice: No lo destruyas, porque es una bendición. Así haré yo por amor de mis siervos: no lo destruiré todo.
Pero en los profetas de Jerusalén he visto monstruosidades: adulterio, obstinación en la falsedad, apoyo a los criminales para que ninguno se convierta de su perversidad; son todos ellos para mí como Sodoma; y sus habitantes, como Gomorra.
se presentaron al profeta Jeremías y le dijeron: 'Acoge por favor nuestros ruegos y pide al Señor, tu Dios, por este pequeño resto que somos nosotros, ya que de tantos como éramos hemos quedado pocos, como estás viendo con tus propios ojos.
En aquellos días, en el tiempo aquel -dice el Señor- se buscará la perversión de Israel y ya no existirá, los pecados de Judá y no se encontrarán, pues yo perdonaré a los que haya dejado.
Las bondades del Señor no se han acabado, ni se han agotado sus misericordias.
La perversidad de la hija de mi pueblo es más grande que el pecado de Sodoma, que fue arrasada en un instante sin que interviniera mano alguna contra ella.
dejaré, sin embargo, supervivientes que pondrán a salvo hijos e hijas. Y vendrán donde vosotros, para que conozcáis su conducta y sus obras y os consoléis de los males que yo he mandado contra Jerusalén, de todo lo que he desencadenado contra ella.
Sin embargo, dejaré un resto de vosotros, los que hayan escapado a la espada, que dispersaré entre las naciones.
Causé entre vosotros desastres como los causó el Señor en Sodoma y Gomorra, y fuisteis como un tizón salvado de un incendio; ¡y no habéis vuelto a mí!, dice el Señor.
¡Señor, he conocido tu fama; Señor, tengo un gran respeto por tu obra! ¡Hazla revivir en nuestro tiempo, en nuestro tiempo dala a conocer y en la ira acuérdate de compadecerte!
Por eso, ¡por mi vida!, dice el Señor omnipotente, Dios de Israel, que Moab será como Sodoma, y los hijos de Amón como Gomorra: campos de cardos, montón de sal, desolación eterna. Los supervivientes de mi pueblo los saquearán, los que queden de mi nación los heredarán.
Y es estrecha la puerta y angosto el camino que lleva a la vida, y son pocos los que lo encuentran'.
Isaías clama sobre Israel: Aunque el número de los israelitas fuera como la arena del mar, sólo un resto se salvará;
Ya el mismo Isaías había predicho: Si el Señor todopoderoso no nos hubiera dejado descendencia, seríamos como Sodoma, iguales a Gomorra.
Y todas las naciones se preguntarán: ¿Por qué el Señor ha tratado así a esta tierra? ¿Por qué se encendió tanto su furor?
condenó a la destrucción y redujo a cenizas las ciudades de Sodoma y Gomorra para que sirviesen de ejemplo a todos los que en el futuro practicaran la injusticia,
Su cadáver quedará tendido en la plaza de la gran ciudad, que simbólicamente se llama Sodoma y Egipto (donde también ha sido crucificado su Señor).