aun los muchachos se cansan, se fatigan, los jóvenes tropiezan y vacilan;
2 Corintios 4:1 - Nueva Biblia Española (1975) Por eso, encargados de este servicio por misericordia de Dios, no nos acobardamos; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos. Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo tanto, ya que Dios, en su misericordia, nos ha dado este nuevo camino, nunca nos damos por vencidos. Biblia Católica (Latinoamericana) Ese es nuestro ministerio, y como lo tenemos por gracia de Dios, no nos desanimamos. La Biblia Textual 3a Edicion Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio, según la misericordia que recibimos, no desmayamos; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por lo tanto, investidos por la misericordia [de Dios] de este ministerio, no perdemos el ánimo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos; |
aun los muchachos se cansan, se fatigan, los jóvenes tropiezan y vacilan;
pero los que esperan en el Señor renuevan sus fuerzas, echan alas como las águilas, corren sin cansarse, marchan sin fatigarse.
Tú dices: i Ay de mí!, que el Señor añade penas a mi dolor; me canso de gemir y no encuentro reposo.
Para explicarles que tenían que orar siempre y no desanimarse, les propuso esta parábola:
En fin de cuentas, ¿qué es Apolo y qué es Pablo? Auxiliares que los llevaron a la fe, cada uno con lo que le dio el Señor.
Respecto a los que no piensan casarse no ha dispuesto el Señor nada que yo sepa; les doy mi parecer como creyente que soy por la misericordia del Señor.
Por eso, teniendo una esperanza como ésta, procedemos con toda franqueza,
Fue él quien nos hizo aptos para el servicio de una alianza nueva, no de código', sino de Espíritu; porque el código da muerte, mientras el Espíritu da vida.
Por esta razón no nos acobardamos; no, aunque nuestro exterior va decayendo, lo interior se renueva de día en día;
Y todo eso es obra de Dios, que nos reconcilió consigo a través del Mesías y nos encomendó el servicio de la reconciliación;
Por tanto, no nos cansemos de hacer el bien, que, si no desmayamos, a su tiempo cosecharemos.
por eso, háganme el favor de no acobardarse cuando paso dificultades por ustedes; ellas son precisamente su gloría.
en mí, antes un blasfemo, perseguidor e insolente. A pesar de eso, como lo hacía con la ignorancia del que no cree, Dios tuvo misericordia de mí;
Mediten, pues, en el que soportó tanta oposición de parte de los pecadores, y no se cansen ni pierdan el ánimo.
Los que antes no eran pueblo, ahora son pueblo de Dios; los que no habían alcanzado misericordia, ahora han alcanzado misericordia'.
Tienes constancia, has sufrido por mí y no te has rendido a la fatiga,