en efecto, las cosas invisibles de él desde la creación del mundo se contemplan entendidas en las obras: su eterna potencia y deidad, de suerte que sean inexcusables,
sin embargo, para nosotros un solo Dios hay, el Padre de quien dependen todas las cosas y nosotros para él. y un solo Señor Jesu-Cristo por quien son todas las cosas y nosotros por él.
Digno eres, Señor y Dios nuestro, de recibir la gloria, el honor y la potencia, porque tú criaste todas las cosas, y por tu voluntad existen y fueron creadas (Nehem. 9:6).
Y los cuatro seres, teniendo cada uno seis alas alrededor, y por dentro llenos de ojos; y no tienen descanso de día y de noche diciendo:'¡Santo, Santo, Santo! el Señor, Dios, el Todopoderoso, el que era, que es y que viene'.
Y oí al ángel de las aguas que decía: Justo eres Tú, que eres y que eras, el santo, porque juzgaste estas cosas,
y sin fe es imposible agradarle porque es menester que el que se allega a Dios crea que existe, y que él es remunerador a los que lo buscan.
como está escrito (Gen. 17-'5): Por padre de muchos gentiles te puse delante de Dios a quien creyó, el cual vivifica a los cuerpos muertos y llama las cosas que no son como existentes.
diciendo: Gracias te damos, Señor, el Dios Todopoderoso, El que es, El que era, porque tomaste tu potencia grande, e inauguraste tu reinado;
Yo soy el alfa y la omega, principio y fin, dice el Señor Dios; el que es y que era y que viene, el Todopoderoso.
Todo por medio de él se hizo, y fuera de él, no se hizo ninguna cosa de lo que ha sido hecho.
porque en él fueron creadas todas las cosas en los cielos y sobre la tierra, las visibles y las invisibles, sean tronos, sean soberanías, sean autoridades, sean potencias; todas las cosas por él y para él están creadas.
Y él es antes de todas, y todas las cosas en él subsisten,
En el principio era el Verbo, y el Verbo estaba cerca a Dios y el Verbo era Dios.
Este estaba en el principio cerca a Dios.
Todo por medio de él se hizo, y fuera de él, no se hizo ninguna cosa de lo que ha sido hecho.
Pues ésta es la vida eterna que te conozcan a ti al único verdadero Dios y al que enviaste, Jesucristo.
Mas digo: ¿acaso no oyeron? al contrario, por toda la tierra salió el sonido de ellos y hasta los cabos del mundo las palabras de ellos (Sal. 19'-4):
el solo que tiene inmortalidad, que habita luz inaccesible, a quien ningún hombre vio ni puede ver, a quien sea honra y potencia eterna. Amén.
El Dios que hizo al mundo y todo cuanto hay en él, éste siendo señor de cielo y de tierra, no habita en templos hechos de manos,
i> ni por manos de hombres es servido necesitado de algo, el que da a todos vida y soplo y todas las cosas,
e hizo de uno toda nación de hombre, para habitar sobre toda la haz de la tierra, determinando sazones preestablecidas, y los límites de la habitación de ellos,
, para buscar a Dios si acaso lo tocasen y lo hallasen, por no estar él lejos de cada uno de nosotros,
porque en él vivimos', nos movemos y somos, como también algunos de los poetas entre vosotros han dicho. De él, en efecto, también somos linaje.
porque cuando gentiles que no tienen ley hacen naturalmente lo que es de la Ley, éstos que no tienen ley, a sí mismos son ley,
los cuales muestran la obra de la Ley escrita en sus corazones, confirmándolo su conciencia y entre sí los pensamientos acusando o también excusando,
enseñándoles a guardar todo cuanto os mandé, y he aquí, yo estoy con vosotros hasta la consumación del siglo.
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, de manera que vean vuestras buenas obras y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos.
ni lo alto, ni lo profundo, ni otra criatura podrá apartarnos del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro.