Tito 3 - Nueva Biblia Española (1975)1 Recuérdales que se sometan al gobierno y autoridades, que hagan caso y estén disponibles para toda buena iniciativa, 2 que no insulten a nadie ni sean agresivos, que sean comprensivos y muestren la mayor sencillez con todo el mundo; 3 porque antes también nosotros con nuestra insensatez y obstinación íbamos fuera de camino: éramos esclavos de pasiones y placeres de todo género, nos pasábamos la vida haciendo daño y comidos de envidia, éramos insoportables y nos odiábamos unos a otros. 4 Pero se hizo visible la bondad de Dios y su amor por los hombres, 5 y entonces, no en base a las buenas obras que hubiéramos hecho, sino por su misericordia, nos salvó con el baño regenerador y renovador, con el Espíritu Santo que Dios 6 derramó copiosamente sobre nosotros por medio de nuestro salvador, Jesús Mesías. 7 Así, rehabilitados por Dios por pura generosidad, somos herederos, con esperanza de una vida eterna. 8 Esto es mucha verdad y en ello quiero que Seas categórico, para que los que ya creen en Dios pongan empeño en señalarse en hacer el bien. Eso es lo bueno y lo útil para los demás. 9 En cambio, a las cuestiones estúpidas, las genealogías, disputas y peleas sobre la Ley, dales de lado; son inútiles y sin sustancia. 10 AL que introduzca división llámalo al orden hasta dos veces, luego no tengas que ver con él. 11 Comprende que un individuo así está desviado y peca, condenándose él mismo. 12 Cuando te mande a Alternas o a Fortunato', procura ir a encontrarme a Nicópolis, donde pienso pasar el invierno. 13 A Zenas el abogado y a Apolo pon cuidado en proveerlos para el viaje, de modo que nada les falte, 14 y que aprendan los nuestros en particular a señalarse en hacer el bien, atendiendo a las necesidades urgentes; así no serán improductivos. 15 Recuerdos de todos los que están conmigo. Saluda tú a nuestros amigos en la fe. La gracia los acompañe a todos ustedes. |
Luis Alonso Schökel y Juan Mateos, 1975 ©, Editada por Ediciones Cristiandad.