El que me rechaza y no recibe mis palabras, tiene a alguien que lo juzga; y es la misma palabra que hablé, ella misma lo juzgará en el último día.
Juan 8:47 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia El que es de Dios, siempre escucha su Palabra; es por esto que ustedes no escuchan la Palabra de Dios, porque no son de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por esto no las oís vosotros, porque no sois de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Los que pertenecen a Dios escuchan con gusto las palabras de Dios, pero ustedes no las escuchan porque no pertenecen a Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) El que es de Dios escucha las palabras de Dios; ustedes no las escuchan porque no son de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion El que es de Dios, oye las palabras de Dios, por esto no oís vosotros, porque no sois de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El que es de Dios escucha las palabras de Dios. Por eso no escucháis vosotros, porque no sois de Dios'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El que es de Dios, las palabras de Dios oye; por eso no las oís vosotros, porque no sois de Dios. |
El que me rechaza y no recibe mis palabras, tiene a alguien que lo juzga; y es la misma palabra que hablé, ella misma lo juzgará en el último día.
Entonces Pilatos le dijo: – ¿acaso eres tú rey? Jesús le respondió: – Tú dices que soy rey; yo para esto he nacido, y para esto he venido al mundo, con el objetivo de dar testimonio de la verdad; todo aquel que es de la verdad, escucha mi voz.
Les digo la verdad, viene la hora y en efecto, ya llegó, cuando los muertos espirituales oirán la voz del Hijo de Dios, y los que la oigan tendrán vida plena.
Jesús siguió diciendo: – Por esto les he dicho que nadie puede venir a mí, a no ser que el Padre lo permita.
Sé que ustedes son del linaje de Abraham, pero me buscan para asesinarme, pues mi palabra no llegó a sus corazones.
¿Por qué no entienden mi enseñanza? ¿Por qué no pueden escuchar mi palabra?
Por medio de las obras se revela quienes son los hijos de Dios y quienes son los hijos del diablo; todo aquel que no practica la justicia, la cual consiste en dignificar y construir al prójimo, no pertenece a Dios y, por ende, no vive un amor sacrificial hacia su hermano.
Todo el que tiene fe en que Jesús es el Cristo, de Dios ha sido engendrado, y todo el que ama al que engendró a Jesús, ama también a Jesús.
Todo el que distorsiona y no permanece en la enseñanza de Cristo no tiene a Dios; el que constantemente permanece y vive en la enseñanza de Cristo tiene al Padre y al Hijo.
Amado mío, no imites lo malo, sino lo bueno. El que hace el bien proviene de Dios, mientras que el que practica lo malo no tiene a Dios y no lo ha experimentado en su vida.