Mateo 24:43 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 De la misma manera que el padre de familia se mantiene vigilante para que los ladrones no se introduzcan en la casa, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese a qué hora el ladrón habría de venir, velaría, y no dejaría minar su casa. Biblia Nueva Traducción Viviente Entiendan lo siguiente: si el dueño de una casa supiera exactamente a qué hora viene un ladrón, se mantendría alerta y no dejaría que asaltara su casa. Biblia Católica (Latinoamericana) Fíjense en esto: si un dueño de casa supiera a qué hora de la noche lo va a asaltar un ladrón, seguramente permanecería despierto para impedir el asalto a su casa. La Biblia Textual 3a Edicion Pero sabed esto: Si el dueño de la casa hubiera sabido a qué hora de la noche vendría el ladrón, velaría y no permitiría que se horadara su casa. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entendedlo bien: si el dueño de casa supiera a qué hora de la noche va a llegar el ladrón, estaría en vela y no dejaría horadar su casa. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero sabed esto, que si el padre de familia supiese en qué vela el ladrón habría de venir, velaría, y no dejaría minar su casa. |
A las tres de la mañana Jesús se les acercó, caminando sobre las aguas turbulentas.
Por lo tanto, deben estar listos, porque no saben cuándo vendrá el Señor.
ustedes también deben estar vigilantes para que mi regreso no los sorprenda.
Así lo hicieron. Pero al regresar encontraron la puerta cerrada, pues el novio había llegado ya y había entrado a la boda con las muchachas que estaban listas con sus lámparas.
»Por lo tanto, manténganse vigilantes, porque no saben cuándo ni a qué hora he de regresar.
Así que, ustedes manténganse despiertos, porque no saben cuándo va a regresar el señor de la casa. No saben si volverá al atardecer, a la media noche, al canto del gallo o al amanecer.
que sus discípulos remaban con dificultad, porque tenían los vientos en contra. Como a las tres de la mañana, se acercó a ellos caminando sobre el agua y siguió como si tuviera intenciones de pasar de largo.
Dichosos los sirvientes a los que su señor encuentre preparados sin importar si llega a la media noche o de madrugada.
Dense cuenta de esto: Si el dueño de una casa supiera la hora a la que va a llegar el ladrón, estaría atento para no dejarlo entrar.
Ustedes estén siempre vigilantes. Oren para que puedan escapar de todo lo que va a suceder, y así puedan presentarse delante del Hijo del hombre».
«Fíjate bien: Yo vengo como un ladrón. Dichoso el que me espera despierto, el que tiene su ropa lista para no tener que andar desnudo y avergonzado».
Vuélvete a lo que oíste y creíste al principio; guárdalo firmemente y arrepiéntete. Si no lo haces, iré a ti como ladrón, cuando menos lo esperes.