Jeremías 26:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Pero si dejan de cometer tantas maldades y comienzan a seguir las instrucciones del Señor su Dios, él revocará todo el castigo que ha anunciado contra ustedes. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Mejorad ahora vuestros caminos y vuestras obras, y oíd la voz de Jehová vuestro Dios, y se arrepentirá Jehová del mal que ha hablado contra vosotros. Biblia Nueva Traducción Viviente pero si ustedes dejan de pecar y comienzan a obedecer al Señor su Dios, él cambiará de parecer acerca del desastre que anunció contra ustedes. Biblia Católica (Latinoamericana) Ahora bien, corrijan su conducta y mejoren sus obras, escuchen la voz de Yavé, y él no ejecutará el mal con que los amenaza. La Biblia Textual 3a Edicion Ahora pues, enmendad vuestros caminos y vuestras obras, y escuchad la voz de YHVH vuestro Dios, para que YHVH desista de haceros el mal que ha predicho contra vosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ahora, pues, enmendad vuestra conducta y vuestras obras y escuchad la voz de Yahveh, vuestro Dios, para que Yahveh se arrepienta del mal que ha predicho contra vosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y ahora, mejorad vuestros caminos y vuestras obras, y oíd la voz de Jehová vuestro Dios, y se arrepentirá Jehová del mal que ha hablado contra vosotros. |
Los que siempre buscan hacer el mal, que abandonen sus malos pensamientos y ese estilo de vida, y vuélvanse al Señor, pues él siempre está dispuesto a perdonarlos; el Señor es un Dios compasivo.
Pues cuando los liberé de la esclavitud de Egipto les dije que si me obedecían y hacían cuanto yo les mandara, ellos y sus descendientes me pertenecerían y yo sería su Dios.
Ve por tanto y adviértele a todo Judá y Jerusalén diciendo: Oigan la palabra del Señor: Estoy planeando hacerles mucho mal en vez de otorgarles beneficios; apártense de su mala conducta y hagan lo bueno.
si esa nación se aparta de su mala conducta, no la destruiré según había planeado.
Pero, ¿lo mataron acaso el rey Ezequías y el pueblo por decir eso? No, sino que dejaron sus actos malvados y rindieron homenaje al Señor y le suplicaron que tuviera misericordia de ellos. Y el Señor no les envió el terrible castigo que les había preparado. Si por comunicarnos los mensajes de Dios matamos a Jeremías, ¡quién sabe qué nos hará el Señor!
Porque tal vez escuchen y se detengan de hacer tantas maldades y entonces pueda yo aguantarme de darles el castigo que se merecen por sus malas acciones.
Les he enviado profeta tras profeta a decirles que se vuelvan de sus malas conductas y dejen de rendir homenaje a otros dioses, y que si obedecían yo los dejaría vivir aquí en paz en la tierra que di a ustedes y a sus antepasados. Pero no quisieron oír ni obedecer.
Quizá cuando el pueblo de Judá vea por escrito todas las terribles cosas que voy a hacerles, se arrepientan, y entonces podré perdonarlos.
Jeremías respondió: ―Basta con que obedezcas al Señor y no caerás en manos de ellos; tu vida será respetada y todo te saldrá bien.
Quédense en esta tierra. Si así hacen, yo los bendeciré y nadie les hará daño, porque me duele todo lo que he tenido que castigarlos.
Diles: “¡Se los aseguro, dice el Señor Dios, que no me complazco para nada en la muerte del impío, sino que deseo que el impío se arrepienta de sus maldades y viva! ¡Dejen de cometer maldades!, pues ¿por qué habrían de morir, oh israelitas?”.
Tal vez cambie de parecer y los perdone, y los bendiga en vez de castigarlos. Quizá haga que la tierra vuelva a producir en abundancia, de modo que tengan cereales y vino para que le presenten sus ofrendas.
Quizás Dios tenga misericordia, deje de estar enojado con nosotros y nos permita seguir viviendo».
Se quejó de ello ante el Señor: ―Señor, esto es exactamente lo que pensé que harías, cuando todavía estaba en mi tierra y me dijiste que viniera a Nínive. Por esta razón hui a Tarsis. Yo sabía que eres un Dios compasivo, misericordioso, que te cuesta mucho enojarte y que eres lleno de bondad. Yo sabía que con facilidad dejarías la idea de destruir a este pueblo.
»Porque el Señor verá que su pueblo tenga justicia y tendrá compasión de ellos cuando se desvíen. Verá cuando su fuerza se agote, tanto en el esclavo como en el libre,
Y habiendo sido perfeccionado de esa manera, llegó a ser el autor de la salvación eterna de todos los que lo obedecen.
Cada juez rescataba al pueblo de Israel de sus enemigos durante su vida, porque el Señor se compadecía del clamor de su pueblo cuando estaba oprimido y acosado.