Porque el pueblo de Judá me ha abandonado y ha adorado a otros dioses, y ha hecho que mi ira arda contra este lugar, sin que se pueda apagar.
Jeremías 1:16 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Así castigaré a mi pueblo por haberme abandonado y por rendirles homenaje a otros dioses, que son sólo ídolos hechos por sus propias manos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y a causa de toda su maldad, proferiré mis juicios contra los que me dejaron, e incensaron a dioses extraños, y la obra de sus manos adoraron. Biblia Nueva Traducción Viviente Pronunciaré juicio contra mi pueblo a causa de toda su maldad, por haberme abandonado y por quemar incienso a otros dioses. ¡Sí, ellos rinden culto a ídolos que hicieron con sus propias manos! Biblia Católica (Latinoamericana) Voy a hacer justicia con este pueblo que me ha dejado para hacer el mal; ha quemado incienso a dioses extranjeros, y se ha puesto a servir a dioses que ellos mismos se fabricaron. La Biblia Textual 3a Edicion Y pronunciaré mis sentencias contra ellos a causa de toda su maldad, porque me abandonaron, quemaron incienso a dioses extraños y se postraron ante las obras de sus propias manos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pronunciaré mis sentencias contra ellos por toda su maldad, pues me abandonaron, incensaron a dioses extraños y adoraron las obras de sus manos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y a causa de toda su maldad, pronunciaré mis juicios contra ellos, quienes me dejaron, y quemaron incienso a dioses extraños, y adoraron la obra de sus propias manos. |
Porque el pueblo de Judá me ha abandonado y ha adorado a otros dioses, y ha hecho que mi ira arda contra este lugar, sin que se pueda apagar.
y le dio un mensaje para el rey Asá. Entonces Azarías fue a encontrar al rey Asá, y le dijo: «¡Escúchame, rey Asá! ¡Escuchen, Judá y Benjamín! ¡El Señor estará con ustedes, siempre y cuando ustedes estén con él! ¡Todas las veces que lo busquen, lo encontrarán! Pero si lo abandonan, él también los abandonará a ustedes.
Al contrario, Acaz siguió el ejemplo de los reyes de Israel, ya que mandó a fabricar imágenes de los baales, que eran dioses falsos.
porque el pueblo lo ha abandonado para ir a adorar a dioses paganos. Esto ha hecho que su ira se desate contra este lugar, y nada hará que cambie de parecer.
»Pero si no me siguen, si rechazan las leyes que les he dado, y adoran ídolos,
Además, su tierra está llena de ídolos. Son productos humanos y, sin embargo, los adoran.
y que han lanzado sus dioses al fuego, porque esos no eran dioses, sino simples ídolos, labrados en madera y piedra por los hombres. Naturalmente los asirios podían destruirlos.
Y después de cuidarlo, emplea parte de la madera para hacer un fuego que lo caliente y para cocinar su pan, y después —realmente es así— toma el resto de la madera y se hace un dios, un dios para que los hombres lo adoren. Un ídolo, ¡un ídolo ante el cual postrarse y al cual alabar!
Todo el día me ofenden cara a cara adorando ídolos en muchos huertos y quemando incienso en las azoteas de sus casas.
¡Que vayan a rogarles a sus ídolos y a quedar bien con ellos ofreciéndoles agradables perfumes! ¡Entonces se darán cuenta de lo incapaces que son esos ídolos de salvarlos!
Por la maldad de Israel y Judá al ofrecerle agradables perfumes como homenaje a Baal es que el Señor de los ejércitos, quien plantó el olivo, también ha determinado su ruina.
Me abandonaste y me volviste la espalda, dice el Señor. Por lo tanto, yo utilizaré mi fuerza para destruirte. Ya estoy harto de darte oportunidad tras oportunidad de que te arrepientas.
diles que la respuesta del Señor es esta: Porque sus antepasados me abandonaron. Adoraron a otros dioses y les fueron muy devotos y fieles, y desobedecieron todas mis instrucciones.
¡Oh Señor, esperanza de Israel, todos cuantos de ti se apartan serán deshonrados y avergonzados! Su futuro es muy mediocre, sólo cosas terrenales, porque han abandonado al Señor, quien es como una fuente de aguas dadoras de vida.
En eso se puede confiar porque pasa con regularidad, pero no en mi pueblo. Porque me han abandonado y puesto su confianza en ídolos que no sirven para nada. Se han alejado de una vida honesta y ahora viven dedicados a cometer toda clase de delitos.
Porque Israel me ha abandonado y ha convertido este valle en sitio de vergüenza e iniquidad. El pueblo le ofrece perfumes agradables a los ídolos en señal de homenaje, ídolos que ni esta generación ni sus antepasados ni los reyes de Judá habían honrado antes, y han empapado en sangre de niños inocentes este lugar.
Porque dos males ha cometido mi pueblo: me abandonaron a mí que soy fuente de agua viva, y han cavado para sí cisternas que no pueden ni siquiera retener agua.
¿No se dan cuenta aún que ustedes se han acarreado esto al rebelarse contra el Señor su Dios cuando él quería guiarlos y mostrarles la forma correcta de vivir?
Su propia maldad será su castigo. Verán lo malo y amargo que es rebelarse contra el Señor su Dios, abandonándolo sin temor, dice el Señor, el Señor de los ejércitos.
¿Por qué no imploran a los dioses que se han fabricado? Cuando sobrevenga el peligro, ¡que te ayuden ellos y te salven si pueden! Porque tienes tantos dioses como ciudades hay en Judá, incluso cada calle de Jerusalén tiene un altar dedicado a un ídolo diferente.
La tierra llorará, los cielos estarán enlutados por la decisión contra mi pueblo, pero estoy resuelto y no la cambiaré.
Haremos lo que se nos antoje. Ofreceremos perfumes agradables en honor a la Reina del Cielo y le sacrificaremos cuanto nos plazca, igual que lo hicimos nosotros y nuestros antepasados, y nuestros reyes y príncipes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén; porque en aquellos días teníamos abundancia de alimentos y estábamos bien acomodados y felices.
¿He de estarme con los brazos cruzados tolerando esta situación?, pregunta el Señor. ¿No he de castigar a un país que vive en esta situación?
¿No los habré de castigar por esto? ¿Tendré que fingir que no me doy cuenta de nada de lo que hacen?
Comparados con él, todos los seres humanos son animales sin inteligencia. ¡Ni uno de ellos tiene sabiduría! Al hacer imágenes y estatuillas de ídolos, el platero se embrutece, pues fabrica mentiras. ¡Dice que son dioses, cuando ni sombra de vida tienen!
¿Acaso no ves todos los delitos que están haciendo por todas las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén?
Tengo mucho motivo para estar enojado. Observa a los niños recogiendo leña, a los padres haciendo fuego y a las mujeres amasando para hacer tortas como ofrenda para la Reina del Cielo y para los demás ídolos.
¿De veras piensan que pueden robar, matar, cometer adulterio, mentir y rendir homenaje a Baal y a todos esos nuevos dioses suyos,
Empleaste la ropa finamente bordada que yo te di ¡para cubrir tus ídolos! ¡Y usaste mi aceite y mi perfume para rendirles homenaje!
Pero después, cuanto más lo llamaba a estar cerca de mí tanto más se rebelaba y era desobediente. Ofrecía homenajes a Baal y ofrecía perfumes delicados a los ídolos.
¿Cuándo vas a reconocer que ese becerro al que le rindes homenaje es sólo un objeto hecho por artesanos? ¡No es Dios! Por lo tanto será hecho pedazos.
El Señor los conduce con su voz de mando. El suyo es un poderoso ejército, con innumerables batallones que siguen sus órdenes. El día del juicio del Señor es algo terrible y pavoroso. ¿Quién podrá mantenerse en pie?
»Se hicieron, pues, un becerro y le ofrecieron sacrificios y se regocijaron por haberlo hecho ellos mismos.
»Porque el Señor mismo enviará su maldición sobre ti. Estarás confuso y fracasarás en todo lo que hagas, hasta que seas destruido por el pecado de haber abandonado a tu Dios.
y le dijo a Moisés: «Tú morirás y te reunirás con tus antepasados. Después de tu partida, este pueblo comenzará a adorar dioses extraños en la tierra en la que van a entrar. Ellos se olvidarán de mí y quebrantarán el pacto que he hecho con ellos.
Si lo abandonan y adoran otros dioses, él se volverá contra ustedes y los destruirá, aunque los haya cuidado durante tanto tiempo.
A pesar de todo eso, las personas que sobrevivieron a aquellas plagas no se arrepintieron de sus malas acciones y siguieron adorando a los demonios y a los ídolos de oro, plata, bronce, piedra y madera que no pueden ver ni oír ni caminar.