Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




1 Reyes 3:8 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Y aquí estoy entre tu pueblo escogido, un pueblo tan numeroso que es imposible contarlo.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Y tu siervo está en medio de tu pueblo al cual tú escogiste; un pueblo grande, que no se puede contar ni numerar por su multitud.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Sin embargo, aquí estoy en medio de tu pueblo escogido, ¡una nación tan grande y numerosa que no se puede contar!

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Tu servidor se las tiene que ver con tu pueblo, al que tú mismo elegiste, y es un pueblo tan numeroso que no se lo puede ni calcular ni contar.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Y tu siervo está en medio de tu pueblo, al cual escogiste; un pueblo tan numeroso que por su multitud no se puede contar ni se puede numerar.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Por otra parte, tu siervo está en medio del pueblo que tú elegiste y que es tan numeroso que no se puede contar ni calcular su muchedumbre.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y tu siervo está en medio de tu pueblo al cual tú escogiste; un pueblo grande, que no se puede contar ni numerar por su multitud.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



1 Reyes 3:8
12 Tagairtí Cros  

Además, tu descendencia será tan numerosa como el polvo de la tierra. De modo que sólo quien sea capaz de contar el polvo de la tierra, podrá contar a tus descendientes.


Luego el Señor hizo que Abram saliera de su carpa, y le dijo: ―Intenta contar todas las estrellas que hay en el cielo, y verás que no puedes. ¡Pues, así de numerosos serán tus descendientes!


te bendeciré muchísimo. Tu descendencia será tan numerosa como las estrellas del cielo y como la arena del mar. Además, tus descendientes poseerán las ciudades de sus enemigos.


En ese tiempo, los pueblos de Israel y Judá eran tan numerosos, como la arena del mar, que no se puede contar. Además, tenían comida y bebidas en abundancia, y todos vivían muy felices.


Por eso, David les dijo a Joab y a los jefes del pueblo: ―Quiero que vayan por todo el país, desde Berseba hasta Dan, y cuenten a todos los israelitas y traíganme ese dato.


y lo quitó de andar arriando los rebaños para que fuera el pastor de los descendientes de Jacob, pastor de Israel el pueblo de Dios;


»Yo los cuidaré, los multiplicaré y cumpliré mi pacto con ustedes.


El Señor no abandonará a su pueblo escogido, porque ello deshonraría su gran nombre. Él los ha hecho una nación especial simplemente porque él lo ha querido.