de modo que los sacerdotes no pudieron continuar su servicio a causa de la nube, pues la gloria del Señor había llenado el templo.
Lucas 2:9 - Biblia Martin Nieto Se les presentó el ángel del Señor, y la gloria del Señor los envolvió con su luz. Ellos se asustaron. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y he aquí, se les presentó un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor; y tuvieron gran temor. Biblia Nueva Traducción Viviente De repente, apareció entre ellos un ángel del Señor, y el resplandor de la gloria del Señor los rodeó. Los pastores estaban aterrados, Biblia Católica (Latinoamericana) Se les apareció un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de claridad. Y quedaron muy asustados. La Biblia Textual 3a Edicion Y° un ángel del Señor se presentó ante ellos, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor, y tuvieron gran temor.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Se les presentó un ángel del Señor y la gloria del Señor los envolvió en claridad. Ellos sintieron un gran temor. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y he aquí, el ángel del Señor vino sobre ellos, y la gloria del Señor los cercó de resplandor; y tuvieron gran temor. |
de modo que los sacerdotes no pudieron continuar su servicio a causa de la nube, pues la gloria del Señor había llenado el templo.
Mientras Aarón estaba hablando, miraron hacia el desierto, y vieron aparecer la gloria del Señor en la nube.
por la mañana veréis la gloria del Señor, porque él ha oído vuestras murmuraciones contra el Señor. ¿Qué somos nosotros para que murmuréis contra nosotros?'.
que dé flores como el narciso, que salte de alegría. Pues se le ha dado la gloria del Líbano, el esplendor del Carmelo y de Sarón; y se verá la gloria del Señor, el esplendor de nuestro Dios.
La gloria del Señor se manifestará y todo mortal la verá, porque la boca del Señor ha hablado.
Levántate, resplandece, porque llega tu luz y la gloria del Señor despunta sobre ti,
Me levanté, salí a la vega, y he aquí que la gloria del Señor estaba allí, como la había contemplado junto al río Quebar; yo caí rostro en tierra.
Estaba pensando en esto, cuando un ángel del Señor se le apareció en sueños y le dijo: 'José, hijo de David, no tengas ningún reparo en recibir en tu casa a María, tu mujer, pues el hijo que ha concebido viene del Espíritu Santo.
Entró donde ella estaba, y le dijo: 'Alégrate, llena de gracia; el Señor está contigo'.
Había en la misma región unos pastores acampados al raso, guardando por turno sus rebaños.
Mientras ellas estaban desconcertadas por esto, se presentaron dos varones con vestidos deslumbrantes.
De repente se presentó un ángel del Señor, y la celda quedó toda iluminada. El ángel tocó a Pedro en el costado y lo despertó diciendo: 'Levántate en seguida'. Y se le cayeron las cadenas de las manos.
Esta noche un ángel del Dios al que pertenezco y a quien sirvo se me ha aparecido y me ha dicho:
Pero un ángel del Señor abrió por la noche las puertas de la cárcel, los sacó y dijo:
Y todos nosotros, con la cara descubierta, reflejando como en un espejo la gloria del Señor, nos transformamos en su misma imagen, resultando siempre más gloriosos, bajo el influjo del Espíritu del Señor.
Y sin duda alguna es grande el misterio de nuestra religión: 'Que se ha manifestado como hombre, ha sido acreditado por el Espíritu, se ha mostrado a los ángeles, ha sido anunciado a las naciones, creído en el mundo, elevado a la gloria'.
Y el espectáculo era tan terrible que Moisés dijo: Estoy aterrado y temblando.
Después de esto vi a otro ángel bajar del cielo con gran poder; la tierra fue iluminada con su esplendor.
Vi un gran trono blanco y al que estaba sentado sobre él. El cielo y la tierra huyeron de su presencia, sin que se encontrase su lugar.