Sus hermanos le tenían envidia, mientras que su padre daba vueltas al asunto.
Lucas 1:66 - Biblia Martin Nieto Todos los que las oían decían pensativos: '¿Qué llegará a ser este niño?'. Porque la mano del Señor estaba con él. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y todos los que las oían las guardaban en su corazón, diciendo: ¿Quién, pues, será este niño? Y la mano del Señor estaba con él. Biblia Nueva Traducción Viviente Los que la oían meditaban sobre los acontecimientos y se preguntaban: «¿Qué llegará a ser este niño?». Pues la mano del Señor estaba sobre él de una manera especial. Biblia Católica (Latinoamericana) La gente que lo oía quedaba pensativa y decía: '¿Qué va a ser este niño?' Porque comprendían que la mano del Señor estaba con él. La Biblia Textual 3a Edicion Y todos los que las oyeron las guardaron en su corazón, diciendo: ¿Quién, pues, llegará a ser este niño? Porque la mano del Señor ciertamente estaba con él. Biblia Serafín de Ausejo 1975 cuantos las oían las grababan en su corazón y se preguntaban: '¿Pues qué llegará a ser este niño?'. Porque, efectivamente, la mano del Señor estaba con él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y todos los que las oían las guardaban en su corazón, diciendo: ¿Quién será este niño? Y la mano del Señor era con él. |
Sus hermanos le tenían envidia, mientras que su padre daba vueltas al asunto.
El Señor estaba con José y todo le salía bien; y se quedó en la casa de su dueño, el egipcio.
El Señor dio fuerzas a Elías, que se ciñó y fue corriendo delante de Ajab hasta Yezrael.
dentro de mi corazón conservo tus órdenes para no pecar nunca contra ti.
Que los que la talaron y quemaron perezcan ante la amenaza de tu rostro.
he encontrado a mi siervo David, y lo he consagrado con el óleo santo;
El niño crecía y se fortalecía en el espíritu. Y vivió en el desierto hasta el día de su manifestación a Israel.
María, por su parte, guardaba todas estas cosas, meditándolas en su corazón.
El niño crecía y se fortalecía, lleno de sabiduría, y la gracia de Dios estaba con él.
Jesús fue con ellos a Nazaret, y les estaba sumiso. Su madre guardaba todas estas cosas en su corazón.
'Grabaos bien estas palabras: El hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres'.
El Señor estaba con ellos, y un gran número creyó y se convirtió al Señor.
por la esperanza de lo que os está reservado en los cielos, de la que ya oísteis hablar por la palabra de la verdad del evangelio
Uno de los jóvenes le dijo: 'Yo conozco a un hijo de Jesé, el de Belén, que toca muy bien la cítara; es valiente y hombre de guerra, sabio en sus palabras, de buena presencia, y el Señor está con él'.
El joven Samuel estaba al servicio del Señor, vestido con un efod de lino.