juzga a las naciones, amontona cadáveres y tritura cabezas en el mundo entero.
Isaías 2:4 - Biblia Martin Nieto Él gobernará las naciones y dictará sus leyes a pueblos numerosos, que trocarán sus espadas en arados y sus lanzas en hoces. No alzará ya la espada pueblo contra pueblo ni se entrenarán ya para la guerra. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor mediará entre las naciones y resolverá los conflictos internacionales. Ellos forjarán sus espadas en rejas de arado y sus lanzas en herramientas para podar. No peleará más nación contra nación, ni seguirán entrenándose para la guerra. Biblia Católica (Latinoamericana) Hará de árbitro entre las naciones
y a los pueblos dará lecciones.
Harán arados de sus espadas y sacarán hoces de sus lanzas.
Una nación no levantará la espada contra otra
y no se adiestrarán para la guerra. La Biblia Textual 3a Edicion Él juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos. De sus espadas forjarán arados y de sus lanzas, hoces; No alzará la espada nación contra nación ni se adiestrarán más para la guerra. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él juzgará las naciones y será el árbitro de pueblos numerosos. De sus espadas forjarán azadones y hoces de sus lanzas. No alzará la espada nación contra nación ni se adiestrarán más en la guerra. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y juzgará entre las naciones, y reprenderá a muchos pueblos; y volverán sus espadas en rejas de arado, y sus lanzas en hoces; no alzará espada nación contra nación, ni se adiestrarán más para la guerra. |
juzga a las naciones, amontona cadáveres y tritura cabezas en el mundo entero.
pone fin a la guerra hasta el confín del mundo, rompe el arco, parte la lanza y quema los escudos.
Venid y ved las obras del Señor, sus prodigios, que llenan la tierra de estupor:
Levántate, oh Dios, haz justicia en la tierra, pues tú imperas sobre todas las naciones.
delante del Señor, porque ya viene, porque viene para gobernar la tierra, para implantar en el mundo la justicia, y entre todos los pueblos la lealtad.
De la justicia brotará la paz, y del derecho, la calma y la seguridad por siempre.
Mi pueblo vivirá en mansión de paz, en moradas seguras, en apacibles lugares de reposo.
se han aflojado sus amarras, no sostienen ya el mástil, ni ondean las enseñas.
Aquí está mi siervo a quien protejo; mi elegido, en quien mi alma se complace. He puesto en él mi espíritu, para que traiga la justicia a las naciones.
No romperá la caña cascada, ni apagará la mecha humeante. Traerá con toda seguridad la justicia.
Que un niño nos ha nacido, un hijo se nos ha dado; sobre sus hombros el imperio, y su nombre será: Consejero admirable, Dios potente, Padre eterno, Príncipe de la paz,
Sí, aquel día -dice el Señor- ella me llamará: 'Marido mío', y no me llamará más: 'Baal mío'.
Aquel día haré en su favor un pacto con las bestias salvajes, con las aves del cielo y con los reptiles de la tierra; romperé en el país arco, espada y lanza y haré que duerman tranquilos.
Él será árbitro entre pueblos numerosos, y juzgará a naciones poderosas y lejanas; ellas cambiarán sus espadas en azadas y sus lanzas en podaderas; no empuñará más la espada pueblo contra pueblo ni se adiestrarán más en la guerra.
Hará que desaparezcan los carros de guerra de Efraín y los caballos de Jerusalén, y desaparecerá el arco de guerra. Él anunciará la paz a las naciones y dominará de mar a mar y desde el río hasta los confines de la tierra.
puesto que ha establecido un día en el que ha de juzgar al universo con justicia por medio de un hombre, a quien ha designado y acreditado ante todos al resucitarlo de entre los muertos'.
Luego vi el cielo abierto, y apareció un caballo blanco; el jinete se llama el fiel, el veraz, y juzga y lucha con justicia.
El Señor aniquila a sus contrarios, el altísimo truena desde el cielo; el Señor juzga los confines de la tierra, dará fuerza a su rey y levantará la frente de su ungido'.