El que de vosotros pertenezca a su pueblo, que su Dios lo ayude y que vaya a Jerusalén, en Judá, a construir el templo del Señor, Dios de Israel, el Dios que está en Jerusalén.
Daniel 6:26 - Biblia Martin Nieto El rey Darío escribió entonces a todos los pueblos, naciones y lenguas que habitan en toda la tierra: 'Vuestra paz sea muy grande. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 De parte mía es puesta esta ordenanza: Que en todo el dominio de mi reino todos teman y tiemblen ante la presencia del Dios de Daniel; porque él es el Dios viviente y permanece por todos los siglos, y su reino no será jamás destruido, y su dominio perdurará hasta el fin. Biblia Nueva Traducción Viviente »Ordeno que en mi reino toda persona tiemble con temor delante del Dios de Daniel. Pues él es el Dios viviente, y permanecerá para siempre. Su reino jamás será destruido, y su dominio nunca tendrá fin. Biblia Católica (Latinoamericana) Este es el decreto que promulgo: En toda la extensión de mi reino, la gente temerá y respetará al Dios de Daniel. El es el Dios vivo, que permanece para siempre: su reino no será destruido y su imperio no tendrá fin. La Biblia Textual 3a Edicion De parte mía es puesta esta ordenanza: Que en todo el dominio de mi reino todos teman y tiemblen ante la presencia del Dios de Daniel; porque Él es el Dios viviente, y permanece por todos los siglos, y su reino no será jamás destruido, y su dominio perdurará eternamente. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Después el rey Darío escribió a todos los pueblos, naciones y lenguas que moran en toda la tierra: '¡Que vuestra paz sea grande! Biblia Reina Valera Gómez (2023) De parte mía es puesta ordenanza, que en todo el señorío de mi reino, todos teman y tiemblen ante la presencia del Dios de Daniel; porque Él es el Dios viviente y permanece por la eternidad, y su reino no será destruido, y su señorío permanecerá hasta el fin. |
El que de vosotros pertenezca a su pueblo, que su Dios lo ayude y que vaya a Jerusalén, en Judá, a construir el templo del Señor, Dios de Israel, el Dios que está en Jerusalén.
Y yo, el rey Artajerjes, ordeno a todos los tesoreros de Transeufratina que todo lo que os pida Esdras, sacerdote y escriba experto en la ley del Dios del cielo, se lo deis puntualmente,
ante ti se estremece mi cuerpo de terror, tengo miedo de tus decisiones.
El Señor reinará eternamente; él es tu Dios, Sión, por todas las edades.
El Señor asienta su trono encima del diluvio, el Señor gobierna como rey eterno.
Como la cierva busca corrientes de agua, así mi alma te busca a ti, Dios mío;
Todo esto lo ha hecho mi mano, y mío es todo ello -dice el Señor-. Pero aquel en quien fijo yo mis ojos es el humilde, el de contrito corazón, que tiembla a mi palabra.
En cambio, el Señor es el Dios verdadero, el Dios viviente, el rey eterno; cuando él se irrita, la tierra se estremece, y las naciones no pueden soportar su cólera.
En los días de estos reyes, el Dios del cielo hará surgir un imperio que jamás será destruido y cuya soberanía no pasará a otro pueblo. Pulverizará y aniquilará a todos estos imperios, mientras que él subsistirá eternamente,
Sí, hemos pecado, hemos obrado inicuamente alejándonos de ti; hemos fallado en todo y no hemos guardado tus preceptos,
Entonces promulgué la orden de que se presentaran ante mí todos los sabios de Babilonia, a fin de que me diesen la interpretación del sueño.
Ahora yo, Nabucodonosor, alabo, ensalzo y glorifico al rey del cielo, porque todas sus obras son verdad, todos sus caminos son justicia y porque sabe humillar a los que proceden con orgullo'.
Por la mañana, al rayar el alba, el rey se levantó y marchó precipitadamente al foso de los leones.
Se le dio poder, gloria e imperio, y todos los pueblos, naciones y lenguas le servían. Su poder era un poder eterno, que nunca pasará, y su reino no será destruido jamás.
Y el reino, el poder y la grandeza de los reinos que hay bajo todo el cielo serán entregados al pueblo de los santos del altísimo; su reino será un reino eterno y todos los imperios le servirán y estarán sujetos a él.
Pues yo, el Señor, no cambio; y vosotros no dejáis de ser hijos de Jacob.
reinará sobre la casa de Jacob para siempre y su reino no tendrá fin'.
Os diré a quién debéis de temer: Temed al que después de haberos matado puede echaros en el fuego. Sí, temed a éste.
Ni es servido por manos humanas, como si necesitase algo él, que da a todos la vida, el aliento y todas las cosas;
Y donde les dije: Vosotros no sois mi pueblo, allí serán llamados hijos del Dios vivo.
Porque de todo ser viviente, ¿quién hay como nosotros que haya oído la voz del Dios vivo hablar de en medio del fuego y haya quedado con vida?
Ellos mismos van refiriendo la acogida que nos hicisteis, y cómo dejasteis la idolatría y os convertisteis para servir al Dios vivo y verdadero,
Todo don excelente y todo don perfecto viene de lo alto, del Padre de las luces, en el que no hay cambio ni sombra de variación.
El séptimo ángel tocó la trompeta, y se oyeron en el cielo voces potentes que decían: El imperio del mundo ha pasado a nuestro señor y a su mesías; él reinará por los siglos de los siglos.
los veinticuatro ancianos se arrodillan delante del que está sentado en el trono, adoran al que vive por los siglos de los siglos y arrojan sus coronas delante del trono, diciendo:
Y los cuatro seres vivientes decían: Amén. Y los ancianos se pusieron de rodillas en profunda adoración.
David preguntó a los que estaban a su lado: '¿Qué se hará con el que mate a este filisteo y quite esta ofensa de Israel? ¿Quién es este filisteo incircunciso que desafía al ejército del Dios vivo?'.
Tu siervo ha matado al león y al oso. Ese filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha desafiado a los ejércitos del Dios vivo'.