Y si dicen: '¿Cómo lo perseguiremos, cómo hallaremos de qué acusarlo?''.
Lucas 8:13 - Nueva Biblia Española (1975) Los de las rocas' son los que, al escucharlo, reciben el mensaje con alegría, pero éstos no tienen' raíces; son los que por algún tiempo creen, pero en el momento de la prueba desertan. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Los de sobre la piedra son los que habiendo oído, reciben la palabra con gozo; pero estos no tienen raíces; creen por algún tiempo, y en el tiempo de la prueba se apartan. Biblia Nueva Traducción Viviente Las semillas sobre la tierra rocosa representan a los que oyen el mensaje y lo reciben con alegría; pero como no tienen raíces profundas, creen por un tiempo y luego se apartan cuando enfrentan la tentación. Biblia Católica (Latinoamericana) Lo que cayó sobre la roca son los que, al escuchar la palabra, la acogen con alegría, pero no tienen raíz; no creen más que por un tiempo y fallan en la hora de la prueba. La Biblia Textual 3a Edicion Los de sobre el terreno pedregoso son los que cuando oyen, reciben la palabra con gozo, pero éstos no tienen raíz; creen por un tiempo, pero en el tiempo de la prueba se apartan. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Los de sobre la piedra son los que, al oír, reciben con alegría la palabra, pero no tienen raíz; creen por algún tiempo, pero en el momento de la tentación retroceden. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los de sobre la roca, son los que habiendo oído, reciben la palabra con gozo; pero estos no tienen raíces; que por un tiempo creen, pero en el tiempo de la prueba se apartan. |
Y si dicen: '¿Cómo lo perseguiremos, cómo hallaremos de qué acusarlo?''.
La codicia es la red de los malvados, los honrados arraigan firmemente.
No estará firme el hombre sobre la maldad, la raíz del honrado no se desprende.
Consultan mi oráculo a diario, muestran deseo de conocer mi camino, como un pueblo que practicara la justicia y no abandonara el mandato de su Dios. Me piden sentencias justas, desean tener cerca a Dios.
Eres para ellos coplero de amoríos, de bonita voz y buen tañedor. Escuchan tus palabras, pero no las practican.
¿Qué haré de ti, Efraín: qué haré de ti, Judá? La lealtad de ustedes es nube mañanera, rocío que se evapora al alba.
porque Herodes miraba con respeto a Juan, sabiendo que era un hombre recto y santo, y lo tenía protegido. Cuando lo escuchaba, quedaba desconcertado, pero le gustaba escucharlo.
'Los del camino' son los que escuchan, pero luego viene el diablo y les quita el mensaje del corazón, para que no crean y se salven.
Lo que cayó entre espinos' son esos que escuchan, pero con los afanes y riquezas y placeres de la vida, poco a poco se ahogan y no maduran.
Todo sarmiento que en mí no produce fruto, lo corta, y a todo el que produce fruto, lo va limpiando, para que dé más fruto.
Si uno no sigue conmigo, lo tiran fuera como al sarmiento y se seca; los recogen, los echan al fuego y se queman.
El era la lámpara encendida que brillaba, y ustedes quisieron por algún tiempo disfrutar de su luz.
Ya puedo hablar inspirado y penetrar todo secreto y todo el saber; ya puedo tener toda la fe, hasta mover montañas, que, si no tengo amor, no soy nada.
ese que los está salvando..., si lo conservan en la forma como yo se lo anuncié; de no ser así, fue inútil que creyeran.
¡Gálatas estúpidos! ¿Quién los ha embrujado? ¡Después que ante sus ojos presentaron a Jesús Mesías en la cruz!
¡Tan magníficas experiencias en vano!, suponiendo que hayan sido en vano.
para que el Mesías se instale por la fe en lo íntimo de ustedes y queden enraizados y cimentados en el amor;
a condición de que permanezcan cimentados y estables en la fe y fijos en la esperanza que escucharon en el evangelio; el que se proclama a toda criatura bajo el cielo, y a cuyo servicio yo, Pablo fui destinado.
arraigados en él, vayan construyéndose sobre él y afirmándose en la fe que les enseñaron, rebosando agradecimiento.
Por esa razón, yo no pude aguantar más y envié a uno que se informara de cómo andaba su fe temiendo que los hubiera tentado el tentador y que nuestras fatigas hubieran resultado inútiles.
armado de fe y de conciencia honrada. Algunos se desentendieron de ella y han naufragado en la fe,
Y nosotros no somos de los que se echan atrás y perecen, sino hombres fieles que conservan la vida.
Ó sea, lo mismo que un cuerpo que no respira es un cadáver, también la fe sin Obras es un cadáver.
Si después de haber escapado de la podredumbre del mundo, gracias al conocimiento de nuestro Señor y Salvador, Jesús el Mesías, otra vez se dejan enredar y vencer por ellos, el final les resulta peor que el principio.
Les ha sucedido lo de aquel proverbio tan acertado: 'El perro vuelve a su propio vómito”y 'cerda lavada se revuelca en el fango'.
Aunque han salido de nuestro grupo, no eran de los nuestros; si hubieran sido de los nuestros se habrían quedado con nosotros, pero tenía que quedar claro que no todos son de los nuestros.
Son éstos los que en sus comidas fraternas -qué vergüenza- banquetean sin recato, echándose pienso. Nubes sin lluvia que se llevan los vientos, árboles que en otoño no dan fruto y que arrancados de cuajo mueren por segunda vez;