El de manos inocentes y puro corazón, el que no se dirige a los ídolos ni jura en falso.
2 Pedro 3:1 - Nueva Biblia Española (1975) Esta es ya, amigos, la segunda carta que les escribo. En las dos les refrescó la memoria, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Amados, esta es la segunda carta que os escribo, y en ambas despierto con exhortación vuestro limpio entendimiento, Biblia Nueva Traducción Viviente Queridos amigos, esta es la segunda carta que les escribo y, en ambas, he tratado de refrescarles la memoria y estimularlos a que sigan pensando sanamente. Biblia Católica (Latinoamericana) Esta es ya, queridos, la segunda carta que les escribo. En ambas he intentado recordarles la sana doctrina. La Biblia Textual 3a Edicion Amados, ésta es ya la segunda epístola que os escribo, en las cuales despierto con exhortación vuestro limpio entendimiento; Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ésta es ya, queridos hermanos, la segunda carta que os escribo. Y en ambas procuro excitar en vosotros, con el recuerdo, una sincera inteligencia. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Amados, esta segunda carta escribo ahora a vosotros; en la cual despierto vuestro sincero entendimiento, por recordatorio; |
El de manos inocentes y puro corazón, el que no se dirige a los ídolos ni jura en falso.
'Qué bueno es Dios para el honrado, el Señor para los limpios de corazón'.
Les prevengo ahora ausente de aquello de que previne en mi segunda visita a los antiguos pecadores y a todos en general: que, cuando vuelva, no tendré contemplaciones;
A ninguno le impongas las manos a la ligera, ni te hagas cómplice de pecados ajenos; tú consérvate honesto.
Por esta razón te recuerdo que reavives el don de Dios que recibiste cuando te impuse las manos;
Aunque hablamos así, amigos míos, en el caso de ustedes estamos ciertos de lo mejor y de lo conducente a la salvación.
Purificados ya internamente por la respuesta a la verdad, que lleva al cariño sincero por los hermanos, ámense unos a otros de corazón e intensamente.
Amigos míos, como forasteros y emigrantes que son, les recomiendo que se mantengan a distancia de esos bajos deseos que nos hacen la guerra;
Por eso, amigos, mientras aguardan esto, pongan empeño en estar en paz con él, libres de mancha y defecto.
Así, pues, amigos, ustedes están prevenidos; estén en guardia para que no los arrastre el error de esos hombres sin principios y pierdan pie.
Pero no olviden una cosa, amigos, que para el Señor un día es como mil años y mil años como un día.
Aunque ustedes lo saben de sobra, quiero, sin embargo, traerles a la memoria que el Señor, después de haber sacado al pueblo de Egipto, exterminó más tarde a los que no creyeron;