Cuando Jesús vio que Natanael se le acercaba, comentó: ―Aquí tienen a un verdadero israelita, en quien no hay falsedad.
Gálatas 6:16 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Mi deseo es que Dios les dé paz y los trate con bondad. Pues todos los que viven de acuerdo a esta verdad son el Israel de Dios. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y a todos los que anden conforme a esta regla, paz y misericordia sea a ellos, y al Israel de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Que la paz y la misericordia de Dios sean con todos los que viven según ese principio; ellos son el nuevo pueblo de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Que la paz y la misericordia acompañen a los que viven según esta regla, que son el Israel de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion Y todos los que caminen° según esta norma, paz y misericordia sobre ellos, y sobre el Israel de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y para todos los que caminan según esta regla, paz y misericordia sobre ellos, y también sobre el Israel de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y a todos los que anduvieren conforme a esta regla, paz y misericordia sea sobre ellos, y sobre el Israel de Dios. |
Cuando Jesús vio que Natanael se le acercaba, comentó: ―Aquí tienen a un verdadero israelita, en quien no hay falsedad.
La paz les dejo; mi paz les doy. Yo no se la doy a ustedes como la da el mundo. No se angustien ni se acobarden.
Yo les he dicho estas cosas para que en mí hallen paz. En este mundo afrontarán aflicciones, pero ¡anímense! Yo he vencido al mundo.
Les escribo a todos ustedes, que están en Roma, a quienes Dios ama y ha llamado a ser parte de su pueblo santo. Que Dios nuestro Padre y el Señor Jesucristo les permitan gozar de su inmerecido amor y de su paz.
Y también es padre de aquellos que han sido circuncidados, pero que también han creído. Ellos siguen el ejemplo de Abraham, quien creyó cuando todavía no estaba circuncidado.
Pido a Dios nuestro Padre y al Señor Jesucristo que les permitan gozar de su inmerecido amor y de su paz.
Y, si ustedes pertenecen a Cristo, son entonces parte de la familia de Abraham y tienen derecho a recibir la promesa que Dios le hizo.
Así que les digo: Vivan guiados por el Espíritu, así no seguirán los deseos de hacer el mal.
Pido a Dios el Padre y al Señor Jesucristo que les permitan gozar de su inmerecido amor y de su paz, y que les dé fe.
Si la circuncisión es la marca del pueblo de Dios, nosotros somos entonces el verdadero pueblo. Y lo somos porque por medio del Espíritu adoramos a Dios, y nos sentimos orgullosos de pertenecer a Cristo Jesús. No creemos que podamos ser salvos por medio del esfuerzo humano.
Y la paz de Dios, que nadie en este mundo alcanza a entender, cuidará sus corazones y sus pensamientos por medio de Cristo Jesús.
¡Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo! Por su gran misericordia, nos ha hecho nuevas personas y nos ha dado seguridad de que recibiremos sus promesas. Es como si nos hubiera hecho nacer de nuevo, y eso lo hizo por medio de la resurrección de Jesucristo.