Niño muere en un trágico accidente y visita el cielo y el infierno – Noe Ñahuero

El testimonio de Noe Josué Ñahuero, un joven que tras sufrir un terrible accidente, tuvo la experiencia de haber sido llevado por Dios al cielo y al infierno.

A la edad de 8 años conoció el evangelio; en este tiempo su padre se encontraba sufriendo una terrible enfermedad, lo que lo llevó a el y a su madre a reconciliarse con el Señor y asistir a la iglesia cristiana.

En el 2003, se fue al campo con sus hermanos, allí en ese campo había una granada de guerra escondida, la cual él tomó y escondió en su casa por ordenes de su hermano mayor. Noe jugaba con este peligroso objeto sin imaginar el terrible daño que le llegaría a causa.

A la edad de 10 años, un 28 de mayo de 2003 la granada explotó en sus mano lo que le quitó la vida de inmediato, su cuerpo voló hacia el techo y su espíritu salió de sí, perdió su brazo, la vista derecha y un dedo de la mano izquierda. Estuvo muerto durante 24 horas, en las cuales tuvo un encuentro sobrenatural con Dios.

Fue entonces cuando fue llevado por Dios al cielo y al infierno y vio cosas sorprendentes. Noe hoy testifica todas las cosas que Dios le permitió ver y el mensaje que Dios mandó por medio de él, a la humanidad.