Porque del corazón proceden los malos pensamientos, homicidios, adulterios, inmoralidades, robos, calumnias y difamaciones.
Mateo 5:28 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia pero yo les digo: todo aquel que mira al cónyuge de su prójimo con deseos sexuales, ya cometió adulterio en su corazón; porque el fundamento de la nueva ética del reino nace en la intención del corazón, y no propiamente en la acción. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero yo digo que el que mira con pasión sexual a una mujer ya ha cometido adulterio con ella en el corazón. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero yo les digo: Quien mira a una mujer con malos deseos, ya cometió adulterio con ella en su corazón. La Biblia Textual 3a Edicion pero Yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero yo os digo: todo el que mira a una mujer con mal deseo, ya cometió adulterio en su corazón [con ella]. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón. |
Porque del corazón proceden los malos pensamientos, homicidios, adulterios, inmoralidades, robos, calumnias y difamaciones.
Pero yo les digo que todo aquel que se enoje contra su hermano, y producto del enojo ejerza venganza, que sea enjuiciado y pague por su delito, y cualquiera que asesine a su hermano con palabras, sea enjuiciado ante el tribunal; y cualquiera que insulte a su hermano, sea culpable y sea llevado al botadero en donde se quema la basura.
Pero les digo: no devuelvan mal por mal; si alguien les golpea en la mejilla derecha, no le devuelvan el golpe, sino ofrézcanle la otra mejilla;
Porque sabemos que la ley es espiritual, pero yo soy carnal al estar dominado por el poder del pecado.
Tienen sus ojos llenos de inmoralidades sexuales y no se cansan de pecar, siempre buscan engañar a las personas ingenuas, tienen sus corazones llenos de codicia y avaricia, y se convierten en hijos de la maldición.
pues todas las cosas pecaminosas que hay en el mundo: las pasiones estimuladas por los deseos sexuales, los deseos causados por la ambición de lo que ven y la arrogancia vanidosa exhibicionista, fruto de los placeres de la vida; estas cosas no provienen del Padre sino que son del mundo.