Él contestó: – El que tuvo misericordia de él y lo ayudó. Entonces Jesús le dijo: – Ve y haz tú lo mismo.
1 Juan 4:11 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Amados míos, si Dios nos amó sacrificialmente, entonces debemos amarnos unos a otros con el mismo amor de Dios en Cristo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Amados, si Dios nos ha amado así, debemos también nosotros amarnos unos a otros. Biblia Nueva Traducción Viviente Queridos amigos, ya que Dios nos amó tanto, sin duda nosotros también debemos amarnos unos a otros. Biblia Católica (Latinoamericana) Queridos, si Dios nos amó de esta manera, también nosotros debemos amarnos mutuamente. La Biblia Textual 3a Edicion Amados, si así nos amó Dios, también nosotros debemos amarnos unos a otros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Queridos míos, si Dios nos ha amado así, también nosotros debemos amarnos unos a otros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Amados, si Dios así nos ha amado, debemos también nosotros amarnos unos a otros. |
Él contestó: – El que tuvo misericordia de él y lo ayudó. Entonces Jesús le dijo: – Ve y haz tú lo mismo.
Un mandamiento nuevo les doy, que se amen con amor sacrificial los unos a los otros, como yo los amé, con mi propia vida, y también ustedes, ámense mutuamente con amor sacrificial.
Quiten de ustedes toda amargura, irritabilidad, enojo con venganza, griterío, maldad y malicia.
sopórtense los unos a los otros, si alguien tiene una queja contra el otro, perdónense; imitando el modelo de Cristo, ya que Él nos perdonó, así también ustedes perdónense.
Amados míos, no les escribo un nuevo mandamiento, sino que guarden el antiguo mandamiento que está desde el principio, es la Palabra que ustedes escucharon atentamente.
Porque este es el mensaje que ustedes escucharon atentamente desde el principio, que nos amemos con el amor sacrificial de Dios en Cristo los unos a los otros.
Este es su mandamiento, que tengamos una fe por identidad en Jesucristo y nos amemos con el amor sacrificial de Dios en Cristo, así como Él nos enseñó.
Amados míos, amémonos los unos a los otros con el amor sacrificial de Dios en Cristo Jesús, porque el amor viene de Dios, todo el que ama ha sido engendrado por Dios y lo conoce íntimamente.
Ahora te suplico ¡Oh amada iglesia!, no escribiendo un nuevo mandamiento, sino profundizando y viviendo el mandamiento que teníamos desde el principio, que consiste en que nos amemos con el amor sacrificial de Dios en Cristo, que es nuestro ejemplo de amor a imitar.