porque mi venida será tan visible como un relámpago que cruza el cielo de este a oeste.
Mateo 24:44 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 ustedes también deben estar vigilantes para que mi regreso no los sorprenda. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, también vosotros estad preparados; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis. Biblia Nueva Traducción Viviente Ustedes también deben estar preparados todo el tiempo, porque el Hijo del Hombre vendrá cuando menos lo esperen. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso, estén también ustedes preparados, porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que menos esperan. La Biblia Textual 3a Edicion Por esto, vosotros también estad preparados, porque el Hijo del Hombre viene a la hora que no pensáis.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso mismo, estad también vosotros preparados; que a la hora en que menos lo penséis llegará el Hijo del hombre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, también vosotros estad apercibidos; porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis. |
porque mi venida será tan visible como un relámpago que cruza el cielo de este a oeste.
Por lo tanto, deben estar listos, porque no saben cuándo vendrá el Señor.
De la misma manera que el padre de familia se mantiene vigilante para que los ladrones no se introduzcan en la casa,
Así lo hicieron. Pero al regresar encontraron la puerta cerrada, pues el novio había llegado ya y había entrado a la boda con las muchachas que estaban listas con sus lámparas.
»Por lo tanto, manténganse vigilantes, porque no saben cuándo ni a qué hora he de regresar.
Dense cuenta de esto: Si el dueño de una casa supiera la hora a la que va a llegar el ladrón, estaría atento para no dejarlo entrar.
Así ustedes estén siempre preparados, porque el Hijo del hombre vendrá cuando menos lo esperen».
Ustedes estén siempre vigilantes. Oren para que puedan escapar de todo lo que va a suceder, y así puedan presentarse delante del Hijo del hombre».
Que todos se den cuenta de que ustedes son amables. El Señor viene pronto.
Hermanos, no se quejen unos de otros, para que no sean juzgados, pues el juez ya está a la puerta.
Alegrémonos, regocijémonos y démosle gloria, porque ha llegado la hora de la boda del Cordero; y a su novia, que ya está preparada,