Los reyes de la tierra se preparan para la batalla; los gobernantes se asocian contra el Señor y contra su ungido.
Lucas 2:26 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 y le había hecho saber que no moriría sin antes ver al Cristo del Señor. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y le había sido revelado por el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Ungido del Señor. Biblia Nueva Traducción Viviente y le había revelado que no moriría sin antes ver al Mesías del Señor. Biblia Católica (Latinoamericana) Le había sido revelado por el Espíritu Santo que no moriría antes de haber visto al Mesías del Señor. La Biblia Textual 3a Edicion Y le había sido revelado por el Espíritu Santo que no vería la muerte antes que viera al Ungido del Señor. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El Espíritu Santo le había revelado que no moriría sin ver al ungido del Señor. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y le había sido revelado por el Espíritu Santo, que no vería la muerte antes que viese al Cristo del Señor. |
Los reyes de la tierra se preparan para la batalla; los gobernantes se asocian contra el Señor y contra su ungido.
El Señor declara: «Este es el rey que he elegido. Lo he puesto en el trono de Jerusalén, mi santo monte».
Ser amigo tuyo, oh Dios, es privilegio de quienes te honran. Sólo con ellos compartes los secretos de tu pacto.
El Espíritu del Señor Todopoderoso está sobre mí, porque me eligió para traer buenas noticias a los pobres, para consolar a los afligidos y para anunciarles a los prisioneros que pronto van a quedar en libertad.
¡Claro que no pasa nada al azar! Dios, el Señor, antes de hacer algo, primero se lo comunica a sus siervos los profetas, para que estos a su vez le adviertan a su pueblo.
Después Dios les avisó en sueños que no regresaran a donde estaba Herodes, y por eso se fueron a su país por otro camino.
«Ahora, Soberano Señor, tu palabra se ha cumplido: ya puedes dejar que este tu siervo muera en paz,
Les aseguro que algunos de los que están aquí no morirán sin antes haber visto el reino de Dios.
Andrés, al primero que encontró fue a su hermano Simón y le dijo: ―Hemos encontrado al Mesías (es decir, al Cristo).
Pero estas se han escrito para que ustedes crean que Jesús es el Cristo, el Hijo de Dios, y para que al creer en su nombre tengan vida.
―Vengan a ver a un hombre que me ha dicho todo lo que he hecho. ¿No será este el Cristo?
»Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret y él anduvo haciendo el bien y sanando a los oprimidos por el diablo, porque Dios estaba con él.
explicándoles que era necesario que el Mesías sufriera y que resucitara de los muertos, y que Jesús, a quien él predicaba, era el Mesías.
»Por lo tanto, pueblo de Israel, sepan bien que Dios ha hecho Señor y Mesías a Jesús, el que ustedes crucificaron».
Por la fe, Enoc fue llevado de este mundo sin que experimentara la muerte; y no lo encontraron porque Dios se lo llevó. Pero antes de llevárselo, Dios declaró que él le había agradado.