Pero ella continuó con sus insinuaciones día tras día, a pesar de que él se negaba y evitaba en todo lo posible encontrarse con ella a solas.
Génesis 39:11 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Un día, mientras José estaba haciendo sus quehaceres en la casa, ella aprovechó que no había nadie más en la casa, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 aconteció que entró él un día en casa para hacer su oficio, y no había nadie de los de casa allí. Biblia Nueva Traducción Viviente Cierto día, sin embargo, José entró a hacer su trabajo y no había nadie más allí. Biblia Católica (Latinoamericana) Cierto día, José entró en la casa para cumplir su oficio, y ninguno del personal de la casa estaba en ella. La Biblia Textual 3a Edicion Pero aconteció cierto día, que cuando él entraba en la casa para hacer su oficio, y no habiendo allí nadie de los de la casa, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Un día entró él en la casa para hacer su trabajo, sin que estuviera presente ninguna otra persona. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y sucedió que un día José entró en casa para hacer su oficio, y no había nadie de los de casa allí. |
Pero ella continuó con sus insinuaciones día tras día, a pesar de que él se negaba y evitaba en todo lo posible encontrarse con ella a solas.
lo agarró de la túnica y le ordenó: ―¡Acuéstate conmigo! Él salió corriendo, pero ella logró echarle mano del manto y se lo quitó.
El agua robada es más refrescante; y el pan que se come a escondidas sabe mejor!
¿Podrá alguien ocultarse de mí? ¿No estoy yo acaso en todas partes, en el cielo y en la tierra?
«Dentro de poco tiempo vendré y los juzgaré. Testificaré prontamente contra los hechiceros, contra los adúlteros, contra los mentirosos, contra los que roban a sus jornaleros, contra los que oprimen a las viudas y a los huérfanos, y contra los que son injustos con los extranjeros, sin tener temor de mí. Lo digo yo, el Señor Todopoderoso.
Es vergonzoso aun hablar de muchas de las cosas que ellos hacen a escondidas.
Que entre ustedes ni siquiera se mencionen pecados sexuales, o cualquier forma de impureza o de avaricia. Eso no es propio del pueblo santo de Dios.