Cantares 4:3 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Como cinta escarlata son tus labios, y ¡qué bellas tus palabras! Tus mejillas, tras el velo parecen dos mitades de granadas. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Tus labios como hilo de grana, Y tu habla hermosa; Tus mejillas, como cachos de granada detrás de tu velo. Biblia Nueva Traducción Viviente Tus labios son como una cinta escarlata; tu boca me cautiva. Tus mejillas son como granadas color rosa detrás de tu velo. Biblia Católica (Latinoamericana) Tus labios son una cinta roja,
y tu hablar es encantador.
Tus mejillas son las mitades de
una granada a través de tu velo. La Biblia Textual 3a Edicion Tus labios son como una cinta de grana, Y tu hablar, gracioso. Tus mejillas, cual granada partida Detrás de tu velo. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tus labios, como cinta de escarlata y tu boca graciosa. Tus mejillas, como mitades de granada a través de tu velo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Tus labios, como hilo de grana, y tu habla hermosa; tus mejillas, como cachos de granada entre tus guedejas. |
Mira, no soy digno de recibir la más pequeña de las misericordias que me has mostrado una y otra vez, conforme a tu promesa. Cuando salí de mi hogar y crucé el río Jordán, la única posesión que tenía era mi bastón; pero ahora necesito dos campamentos para guardar todo lo que tengo.
y le dije en oración: «Dios mío, estoy avergonzado. Tengo vergüenza de levantar el rostro hacia ti, porque nuestros pecados son tantos, que sobrepasan nuestras cabezas, y nuestra culpa es tan grande como los cielos.
Eres entre todos el más apuesto; tus labios son fuente de elocuencia, ya que Dios te ha bendecido para siempre.
En los labios del sabio hay palabras de sabiduría, pero para el necio son los azotes en la espalda.
Cuando habla, sus palabras son sabias, cuando enseña, lo hace siempre con amor.
Soy morena y hermosa, hijas de Jerusalén, bronceada como las oscuras tiendas de Cedar. ¡Y soy bella como las tiendas de Salomón!
Tus labios, amada mía, destilan miel. Sí, miel y crema escondes bajo tu lengua, y el aroma de tus vestidos es como el de los montes y cedros del Líbano.
Sus mejillas son como lecho de dulce bálsamo, como cultivos de aromáticas hierbas. Perfumados lirios son sus labios, como mirra es su aliento.
Su boca es dulcísima, él es todo un amor. Así, oh mujeres de Jerusalén, es mi amado, ¡así es mi amor!
y tus besos tan embriagantes como el mejor vino, que resbala suavemente por labios y dientes.
A pesar de todo lo que has hecho, yo seré bondadoso contigo de nuevo. Bajarás tu rostro avergonzada cuando yo te perdone de todo lo malo que has hecho, dice el Señor Dios».
pedirá que le traigan dos avecillas vivas y puras, madera de cedro, una cinta roja y una rama de hisopo.
Después tomará la otra avecilla, es decir, la que está viva, la mojará en la sangre junto con la madera de cedro, la cinta roja y el hisopo.
Eleazar entonces tomará madera de cedro, ramas de hisopo e hilo escarlata y los arrojará en la fogata.
Extenderán un paño escarlata sobre todo eso, y por último lo taparán todo con una piel de cabra. Después meterán las varas en los anillos de la mesa, para el transporte.
El habla de un hombre bueno revela la bondad de su corazón. El corazón del malo está lleno de maldad, y esta se refleja en sus palabras.
Todos se expresaban bien de él y estaban admirados por las hermosas palabras que él hablaba. Estaban intrigados y se preguntaban: ―¿No es este el hijo de José?
Nunca empleen un lenguaje sucio; más bien digan palabras que les hagan bien a los que las oyen y los ayuden a madurar.
Hablen siempre con buen gusto y de forma amena. Así podrán contestar siempre las preguntas que les hagan.
Moisés, después de anunciar a todo el pueblo los mandamientos de la ley, tomó lana roja y ramas de hisopo, las mojó con la sangre de los becerros y los chivos mezclada con agua, y con eso roció el libro de la ley y a todo el pueblo.
si no dejas esta cuerda colgando en la ventana y si tus parientes, tu padre, tu madre, tus hermanos o cualquier otro no están dentro de la casa.