El preludio de la ruina es el orgullo; el preludio de la caída, el espíritu altanero.
Isaías 3:16 - Biblia Martin Nieto El Señor dice: Por la altivez de las hijas de Sión, que pasan erguida la cabeza y los ojos provocadores; que caminan a pasitos menudos, haciendo tintinear los aros de sus pies, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Asimismo dice Jehová: Por cuanto las hijas de Sion se ensoberbecen, y andan con cuello erguido y con ojos desvergonzados; cuando andan van danzando, y haciendo son con los pies; Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor dice: «La hermosa Sion es altanera: estira su elegante cuello, coquetea con los ojos y camina con pasos delicados haciendo sonar los brazaletes de sus tobillos. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso, el Señor llenará de sarna la cabeza de las damas de Sión, y quedarán peladas. La Biblia Textual 3a Edicion Dice YHVH: Por cuanto las hijas de Sión son altivas, Y caminan con estirado cuello y mirada provocativa, Y andan con pasitos menudos haciendo tintinear las cadenillas en sus pies, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh ha dicho: 'Puesto que se pavonean las hijas de Sión y van con el cuello erguido, guiñando los ojos, caminando a pasitos, tintineando las ajorcas de sus pies, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Asimismo dice Jehová: Por cuanto las hijas de Sión son orgullosas, y andan con el cuello erguido y con ojos seductores; cuando andan, van danzando y haciendo son con los pies. |
El preludio de la ruina es el orgullo; el preludio de la caída, el espíritu altanero.
Ojos altaneros, corazón soberbio; la luz de los criminales es el delito.
La hija de Sión ha quedado como una choza en una viña, como un tugurio en melonar, como ciudad sitiada.
La tierra está de luto, maldita; mustio y marchito el universo, cielo y tierra marchitos.
Sí, el Señor Dios todopoderoso quitará a Jerusalén y a Judá todo apoyo y sostén, todo sostén de pan, todo sostén de agua:
el Señor llenará de tiña la cabeza de las hijas de Sión, el Señor descubrirá su vergüenza.
Aquel día el Señor arrancará los adornos: hebillas de pies, redecillas y lunetas,
Cuando el Señor haya lavado la mancha de las hijas de Sión y haya limpiado a Jerusalén de la sangre en ella derramada, cuando dicte la sentencia y ejecute la pena,
Aquel día no tendrás que avergonzarte de los crímenes con los que te rebelaste contra mí; porque entonces yo quitaré de en medio de ti a tus orgullosos fanfarrones y dejarás de presumir de mi santo monte.
Jesús se volvió a ellas y les dijo: 'Hijas de Jerusalén, no lloréis por mí; llorad por vosotras y por vuestros hijos,