Sabio de mente y robusto de fuerza, ¿quién puede resistirle impunemente?
Hechos 9:5 - Biblia Martin Nieto Él preguntó: '¿Quién eres, Señor?'. Y él: 'Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Él dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón. Biblia Nueva Traducción Viviente —¿Quién eres, señor? —preguntó Saulo. —Yo soy Jesús, ¡a quien tú persigues! —contestó la voz—. Biblia Católica (Latinoamericana) Preguntó él: '¿Quién eres tú, Señor?' Y él respondió: 'Yo soy Jesús, a quien tú persigues. La Biblia Textual 3a Edicion Contestó: ¿Quién eres, Señor? Y Él: Yo soy Jesús, a quien tú persigues.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Él dijo: '¿Quién eres, Señor?'. Y él: 'Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y él dijo: ¿Quién eres, Señor? Y el Señor dijo: Yo soy Jesús a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra los aguijones. |
Sabio de mente y robusto de fuerza, ¿quién puede resistirle impunemente?
para que no se irrite y os veáis perdidos, pues su cólera se inflama en un instante. ¡Dichosos los que en él buscan refugio!
¡Ay de aquel que litiga con su creador, siendo sólo un tiesto de barro! ¿Dice acaso la arcilla a su alfarero: Qué haces? Le dice su obra: ¿No tienes manos?
Pedro dijo: 'De ningún modo, Señor, porque jamás he comido cosa profana o impura'.
Todos caímos a tierra, y yo oí una voz que me decía en hebreo: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? Duro es para ti dar coces contra el aguijón.
También yo creí deber mío obrar enérgicamente contra el nombre de Jesús Nazareno;
pero si es de Dios, no podréis deshacerla. No os expongáis a luchar contra Dios'. Aceptaron su consejo.
cayó a tierra y oyó una voz que le decía: 'Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues?'.
¿O queremos provocar celos al Señor? ¿Somos acaso más fuertes que él?
Engordó Jesurún y tiró coces -estabas gordo y corpulento-; / volvió las espaldas a Dios, / su creador, / y despreció la roca de su salvación.
No quiero decir con esto que haya alcanzado ya la perfección, sino que corro tras ella con la pretensión de darle alcance, por cuanto yo mismo fui alcanzado por Cristo Jesús.
a mí, que fui antes un blasfemo y violento perseguidor de la Iglesia. Pero tuvo misericordia conmigo, porque, careciendo de fe, obré por ignorancia;