Iba detrás de Pablo y de nosotros gritando: 'Estos hombres son siervos del Dios altísimo, y os anuncian el camino de la salvación'.
Hechos 22:4 - Biblia Martin Nieto yo he perseguido a muerte este nuevo camino, encadenando y metiendo en la cárcel a hombres y a mujeres, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Perseguía yo este Camino hasta la muerte, prendiendo y entregando en cárceles a hombres y mujeres; Biblia Nueva Traducción Viviente Perseguí a los seguidores del Camino, acosando a algunos hasta la muerte, y arresté tanto a hombres como a mujeres para arrojarlos en la cárcel. Biblia Católica (Latinoamericana) Así que perseguí a muerte a este camino e hice encadenar y meter en la cárcel a hombres y mujeres;' La Biblia Textual 3a Edicion Yo perseguí a muerte este Camino, atando y entregando en cárceles a varones y también a mujeres, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Perseguí a muerte este Camino, apresé y encarcelé hombres y mujeres, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y perseguí este Camino hasta la muerte, prendiendo y entregando en cárceles así hombres como mujeres; |
Iba detrás de Pablo y de nosotros gritando: 'Estos hombres son siervos del Dios altísimo, y os anuncian el camino de la salvación'.
Él se puso a hablar con toda libertad en la sinagoga. Mas cuando lo oyeron Priscila y Áquila, lo llevaron aparte y le expusieron con mayor exactitud el camino de Dios.
Por entonces se produjo un gran motín a propósito del nuevo camino del Señor.
Pero como algunos se obstinaban en no creer y desacreditaban el camino del Señor ante la gente, se apartó de ellos, hizo un grupo aparte con los discípulos y se puso a enseñar diariamente en la escuela de Tirano.
Pero te confieso que, conforme al nuevo camino, que ellos llaman secta, sirvo al Dios de nuestros padres, creyendo en todo lo que está escrito en la ley y en los profetas;
lo llevaron fuera de la ciudad y se pusieron a apedrearlo. Los testigos habían dejado sus vestidos a los pies de un joven llamado Saulo.
Todos los que lo escuchaban se quedaban estupefactos y decían: '¿No es éste el que perseguía en Jerusalén a los que invocan ese nombre, y no ha venido aquí para llevarlos encadenados a los sumos sacerdotes?'.
Porque yo soy el menor de los apóstoles, indigno de ser llamado apóstol, por haber perseguido a la Iglesia de Dios.
Conocéis mi conducta anterior dentro del judaísmo: con qué crueldad perseguía y trataba de aniquilar a la Iglesia de Dios,
por amor a la ley fui perseguidor de la Iglesia; en cuanto a la justicia que viene del cumplimiento de la ley, irreprensible.
Muchos los seguirán en sus desvergüenzas, y por su causa será maldecido el camino de la verdad.