Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne

- Fógraí -





Hechos 7:58 - Biblia Martin Nieto

58 lo llevaron fuera de la ciudad y se pusieron a apedrearlo. Los testigos habían dejado sus vestidos a los pies de un joven llamado Saulo.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

58 Y echándole fuera de la ciudad, le apedrearon; y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven que se llamaba Saulo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

58 lo arrastraron fuera de la ciudad y comenzaron a apedrearlo. Sus acusadores se quitaron las túnicas y las pusieron a los pies de un joven que se llamaba Saulo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

58 Los testigos habían dejado sus ropas a los pies de un joven llamado Saulo.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

58 y sacándolo fuera de la ciudad, lo apedrearon, y los testigos pusieron sus ropas a los pies de un joven llamado Saulo.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

58 lo arrastraron fuera de la ciudad y se pusieron a apedrearlo. Los testigos depositaron sus mantos a los pies de un joven llamado Saulo.

Féach an chaibidil Cóip




Hechos 7:58
17 Tagairtí Cros  

Llegaron luego los dos hombres perversos y, encarándosele, testificaron ante la asamblea de esta suerte: 'Nabot ha maldecido a Dios y al rey'. Entonces lo sacaron fuera de la ciudad y lo mataron a pedradas.


El Señor dijo a Moisés: 'Este hombre debe ser condenado a muerte; toda la comunidad lo matará a pedradas fuera del campamento'.


se levantaron, lo sacaron de la ciudad y lo llevaron a la cima del monte sobre el que estaba edificada la ciudad para despeñarlo.


Cuando se derramó la sangre de Esteban, tu testigo, yo mismo estaba allí, consintiendo y guardando las ropas de los que lo mataban.


Como ellos continuaban gritando, agitaban los mantos y tiraban polvo al aire,


yo he perseguido a muerte este nuevo camino, encadenando y metiendo en la cárcel a hombres y a mujeres,


y lo hice, en efecto, en Jerusalén; con la autorización de los sumos sacerdotes, metí en la cárcel a muchos fieles y di mi voto para que los condenaran a muerte.


Entonces sobornaron a unos hombres para que dijeran: 'Nosotros hemos oído a éste decir blasfemias contra Moisés y contra Dios'.


Después presentaron testigos falsos, que dijeron: 'Este hombre no cesa de decir palabras contra este lugar santo y contra la ley;


Ellos, lanzando grandes gritos, se taparon los oídos y se lanzaron todos a una sobre él;


Aquel día se desencadenó una gran persecución contra la Iglesia de Jerusalén; y todos, excepto los apóstoles, se dispersaron por las regiones de Judea y Samaría.


Los testigos pondrán los primeros sus manos sobre el condenado para hacerle morir, y seguirá luego el pueblo. De esta manera extirparás el mal de en medio de ti.


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí