Y Esaú respondió: 'Estoy que me muero, ¿de qué me sirve la primogenitura?'.
Génesis 37:26 - Biblia Martin Nieto Judá dijo a sus hermanos: '¿Qué sacamos con matar a nuestro hermano y ocultar su sangre? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Entonces Judá dijo a sus hermanos: ¿Qué provecho hay en que matemos a nuestro hermano y encubramos su muerte? Biblia Nueva Traducción Viviente Judá dijo a sus hermanos: «¿Qué ganaremos con matar a nuestro hermano? Tendríamos que encubrir el crimen. Biblia Católica (Latinoamericana) Entonces Judá dijo a sus hermanos: '¿Qué ganamos con matar a nuestro hermano y tapar su sangre?' La Biblia Textual 3a Edicion Entonces Judá dijo a sus hermanos: ¿Qué provecho hay en que matemos a nuestro hermano y ocultemos su sangre? Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo entonces Judá a sus hermanos: '¿Qué ganamos con matar a nuestro hermano y ocultar su sangre? Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Judá dijo a sus hermanos: ¿Qué provecho hay en que matemos a nuestro hermano y encubramos su muerte? |
Y Esaú respondió: 'Estoy que me muero, ¿de qué me sirve la primogenitura?'.
Vamos a matarlo: lo echamos en una cisterna y luego decimos que una bestia feroz lo devoró. Veremos en qué paran sus sueños'.
El Señor le dijo: '¿Qué has hecho? La voz de la sangre de tu hermano grita de la tierra hasta mí.
El Señor preguntó a Caín: '¿Dónde está tu hermano?', y él respondió: 'No lo sé. ¿Es que soy yo el guardián de mi hermano?'.
Pues la verdad es que fui arrebatado del país de los hebreos y aquí tampoco he hecho nada para que se me meta en la cárcel'.
Y se decían unos a otros: 'Verdaderamente estamos pagando lo que hicimos con nuestro hermano. Lleno de angustia nos pedía clemencia, y no le hicimos caso. Por eso nos ha venido esta desgracia'.
Ciertamente vosotros os portasteis mal conmigo, pero Dios lo cambió en bien, para hacer lo que hoy estamos viendo, para mantener en vida a un gran pueblo.
David le dijo: '¡Que tu sangre caiga sobre tu cabeza!, porque tu boca ha dado testimonio contra ti, diciendo: Yo he matado al ungido del Señor'.
más aún, por más que Elnatán, Delayas y Gamarías rogaron al rey que no quemara el libro, él no les hizo caso.
Aunque hubo diez de aquellos hombres que dijeron a Ismael: 'No nos mates, pues tenemos escondidas en el campo provisiones de trigo, cebada, aceite y miel'. Y él los respetó y no los mató como a sus compañeros.
porque la sangre por ella vertida está dentro de ella; la ha esparcido sobre roca desnuda, no la ha vertido en tierra para que el polvo la cubriese.
¿Qué le vale al hombre ganar el mundo entero si pierde su vida? ¿Y qué dará el hombre a cambio de su vida?
¿Qué frutos lograbais entonces? Aquellos de los que ahora os avergonzáis, porque su fin es la muerte.
Si te encuentras en tu ciudad con una causa difícil, de homicidio, peleas, lesiones u otro litigio cualquiera, irás al lugar elegido por el Señor, tu Dios,