Bíobla ar líne

Fógraí


An Bíobla ar fad Sean-Tiomna Tiomna Nua




Génesis 33:4 - Biblia Martin Nieto

Esaú corrió a su encuentro, lo abrazó, se echó a su cuello y lo besó, y los dos se echaron a llorar.

Féach an chaibidil
Taispeáin Interlinear Bible

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

Pero Esaú corrió a su encuentro y le abrazó, y se echó sobre su cuello, y le besó; y lloraron.

Féach an chaibidil

Biblia Nueva Traducción Viviente

Entonces Esaú corrió a su encuentro y lo abrazó, puso los brazos alrededor de su cuello y lo besó. Y ambos lloraron.

Féach an chaibidil

Biblia Católica (Latinoamericana)

Esaú corrió al encuentro de su hermano y lo abrazó; echándose sobre su cuello lo besó, y los dos rompieron a llorar.

Féach an chaibidil

La Biblia Textual 3a Edicion

Y corrió Esaú a su encuentro y lo abrazó, se echó sobre su cuello y lo besó, y lloraron.

Féach an chaibidil

Biblia Serafín de Ausejo 1975

Corrió Esaú a su encuentro, lo abrazó y se arrojó a su cuello; lo besó, y ambos lloraron.

Féach an chaibidil

Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y Esaú corrió a su encuentro, y le abrazó, y se echó sobre su cuello, y le besó; y lloraron.

Féach an chaibidil
Aistriúcháin eile



Génesis 33:4
18 Tagairtí Cros  

Después besó a Raquel y rompió a llorar.


Cuando Labán oyó que había llegado su sobrino Jacob, corrió a su encuentro, lo abrazó, lo besó y lo llevó a su casa. Jacob contó a Labán todo lo sucedido.


yo no soy digno de todos tus favores y de todo el bien que has hecho a tu siervo, pues pasé este Jordán sólo con mi bastón y ahora puedo formar dos campamentos.


Él le preguntó: '¿Cómo te llamas?'. Contestó: 'Jacob'.


José salió apresuradamente porque estaba muy emocionado a la vista de su hermano y se le saltaban las lágrimas. Entró en su habitación y se puso a llorar.


Él les mandaba desde su mesa las porciones, y la porción de Benjamín era cinco veces mayor que la de todos los otros. Así bebieron y se alegraron en su compañía.


Entonces rompió a llorar a voz en grito, de modo que lo oyeron los egipcios, y la noticia llegó a casa del Faraón.


José hizo enganchar su carro y salió al encuentro de su padre, Israel, a Gosen. Al verlo, se echó a su cuello y lloró largamente abrazado a él.


Joab se presentó al rey y se lo comunicó. Entonces el rey llamó a Absalón. Absalón se presentó y se postró rostro en tierra ante el rey. Y el rey besó a Absalón.


Oh Señor, estén atentos tus oídos a la súplica de tu siervo y a la oración de tus servidores, que quieren ser fieles a ti. Concede éxito a tu siervo y haz que tengan buena acogida ante ese hombre'. Era yo entonces copero del rey.


Al levantar sus ojos desde lejos no lo reconocieron, y se pusieron a llorar a grandes voces, rasgando cada uno su manto y esparciendo polvo sobre sus cabezas.


alabad conmigo la grandeza del Señor, ensalcemos su nombre todos juntos.


Cuando el Señor se complace en la conducta de un hombre, reconcilia con él incluso a sus enemigos.


El corazón del rey es canal de agua en manos del Señor, él lo inclina hacia donde quiere.


Se puso en camino y fue a casa de su padre. Cuando aún estaba lejos, su padre lo vio y, conmovido, fue corriendo, se echó al cuello de su hijo y lo cubrió de besos.


Todos rompieron a llorar, se echaron al cuello de Pablo y lo besaron,


El muchacho se marchó, y entonces David salió de junto al montón de piedras y se postró en tierra por tres veces. Después ambos se abrazaron y lloraron juntos largo tiempo.