Apareció el fondo de los mares, los cimientos de la tierra quedaron al desnudo al fragor, oh Señor, de tu amenaza, al resollar del viento en tus narices.
Éxodo 15:8 - Biblia Martin Nieto Al soplo de tu cólera se agolparon las aguas, se irguieron cual pilares las corrientes; se cuajaron los abismos en medio de la mar. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Al soplo de tu aliento se amontonaron las aguas; Se juntaron las corrientes como en un montón; Los abismos se cuajaron en medio del mar. Biblia Nueva Traducción Viviente Al soplido de tu aliento, ¡las aguas se apilaron! El impetuoso oleaje se quedó firme como un muro; en el corazón del mar las aguas se endurecieron. Biblia Católica (Latinoamericana) Al soplo de tus narices retroceden las aguas,
las olas se paran como murallas;
los torbellinos cuajan en medio del mar. La Biblia Textual 3a Edicion Con el viento de tus narices, Se amontonaron las aguas, Fluyeron erguidas como dique, Los abismos se cuajaron, En el corazón del mar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Al soplo de tu ira se aglomeran las aguas, se alzan las olas como un dique, se cuajan los abismos en el corazón del mar. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Al soplo de tu aliento se amontonaron las aguas; se juntaron las corrientes como en un montón; los abismos se cuajaron en medio del mar. |
Apareció el fondo de los mares, los cimientos de la tierra quedaron al desnudo al fragor, oh Señor, de tu amenaza, al resollar del viento en tus narices.
Bajo el soplo de Dios perecen éstos, por el viento de su ira son aniquilados.
Él juntó entre diques las aguas de los mares y almacenó en depósitos las aguas del abismo.
dividió el mar para hacerles pasar, sosteniendo las aguas como con un dique;
Pero los israelitas pasaron sin mojarse por medio del mar, formando para ellos las aguas como una muralla a ambos lados.
juzgará con justicia a los débiles, y con rectitud a los pobres del país; al tirano herirá con la vara de su boca, matará al criminal con el soplo de sus labios.
Yo le infundiré un espíritu tal que, al oír cierta noticia, se volverá a su país, y allí yo lo haré caer a espada'.
Te ven los montes y tiemblan, un diluvio de agua irrumpe, el abismo deja oír su voz, levanta a lo alto sus manos.
Tú lanzas tus caballos en el mar, en el oleaje de las inmensas aguas.
Entonces se manifestará el hombre de la iniquidad, a quien Jesús, el Señor, hará desaparecer con el soplo de su boca y aniquilará con el resplandor de su venida.
Tan pronto como las plantas de los pies de los sacerdotes que llevan el arca del Señor de toda la tierra toquen las aguas del Jordán, la corriente del río se cortará y las aguas que vienen de arriba se pararán formando como un muro'.
las aguas que venían de arriba se pararon y se amontonaron a mucha distancia -desde Adán hasta la ciudad que está próxima a Sartán-, y las que bajaban al mar de Arabá, el mar Muerto, quedaron enteramente separadas de las otras, mientras el pueblo pasó frente a Jericó.