Efesios 6:17 - Biblia Martin Nieto Tomad también el yelmo de la salud y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; Biblia Nueva Traducción Viviente Pónganse la salvación como casco y tomen la espada del Espíritu, la cual es la palabra de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) Por último, usen el casco de la salvación y la espada del Espíritu, o sea, la Palabra de Dios. La Biblia Textual 3a Edicion y aceptad° el yelmo de la salvación° y la espada° del Espíritu, que es la palabra de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Tomad el casco de la salvación y la espada del Espíritu, o sea, la Palabra de Dios. Biblia Reina Valera Gómez (2023) y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; |
Hizo de mi boca una espada afilada, con la sombra de su mano me guardó; hizo de mí una flecha aguzada, en su aljaba me escondió.
Se revistió de justicia como de una coraza, y puso en su cabeza el yelmo de la salvación; se vistió la venganza como una túnica y se envolvió en la indignación como en un manto.
Por eso te hice pedazos; por medio de los profetas, te he matado con las palabras de mi boca, y mi justicia brota como la luz.
Entonces me dijo: Ésta es la palabra del Señor sobre Zorobabel: 'No por el poder de las armas ni por la violencia, sino por mi espíritu, palabra del Señor todopoderoso.
Pero él respondió: 'Está escrito: No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios'.
a fin de santificarla por medio del agua del bautismo y de la palabra,
Por el contrario, nosotros, hijos del día, seamos sobrios; revistámonos de la coraza de la fe y del amor, cubriéndonos con el yelmo de la esperanza de la salvación.
Pues la palabra de Dios es viva y eficaz y más aguda que espada de dos filos; ella penetra hasta la división del alma y del espíritu, de las articulaciones y de la médula, y es capaz de juzgar los sentimientos y los pensamientos.
que saborearon la dulzura de la palabra de Dios y las maravillas del mundo venidero
en su mano derecha tenía siete estrellas, y de su boca salía una espada aguda de dos filos; su cara era como el sol que brilla en todo su esplendor.
Ellos le han vencido por la sangre del cordero y por el testimonio que proclamaron, y han despreciado su vida hasta sufrir la muerte.
De su boca sale una espada afilada para herir a las naciones; él las regirá con vara de hierro; él pisa el lagar del vino de la ardiente ira del Dios todopoderoso.
Arrepiéntete, pues de lo contrario iré cuanto antes y lucharé contra ellos con la espada de mi boca.
Llevaba sobre su cabeza un casco de bronce y vestía una coraza de malla, también de bronce, que pesaba sesenta kilos.
Saúl le preguntó: '¿De quién eres hijo, muchacho?'. David le respondió: 'Soy hijo de tu siervo Jesé, el de Belén'.