Cuando pequen contra ti -pues no hay hombre que no peque-, y tú, irritado contra ellos, los entregues al enemigo, que los llevará cautivos a tierra enemiga, lejana o cercana;
1 Juan 1:8 - Biblia Martin Nieto Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y no decimos la verdad. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. Biblia Nueva Traducción Viviente Si afirmamos que no tenemos pecado, lo único que hacemos es engañarnos a nosotros mismos y no vivimos en la verdad; Biblia Católica (Latinoamericana) Si decimos que no tenemos pecado, nos estamos engañando a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. La Biblia Textual 3a Edicion Si dijéramos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y la verdad no está en nosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos y la verdad no está en nosotros. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros. |
Cuando pequen contra ti -pues no hay hombre que no peque-, y tú, irritado contra ellos, los entregues al enemigo, que los llevará cautivos a tierra enemiga, lejana o cercana;
'¿Qué han visto en tu casa?', replicó Isaías. Y Ezequías respondió: 'Han visto todo lo que hay; nada ha habido en mis almacenes que no se lo haya enseñado'.
Cuando pequen contra ti, pues no hay hombre que no peque, y tú, irritado contra ellos, los entregues al enemigo que los llevará cautivos a tierra enemiga, lejana o cercana,
¿Cómo puede ser puro un hombre? ¿Cómo puede ser justo el nacido de mujer?
¿Cómo, pues, puede ante Dios ser justo un hombre? ¿Cómo puro el nacido de mujer?
En verdad, bien sé yo que es así; ¿cómo frente a Dios puede tener razón el hombre?
Todos nosotros, como ovejas, andábamos errantes; cada cual siguiendo su propio camino. Y el Señor ha hecho recaer sobre él la perversidad de todos nosotros.
No hubo nadie que invocara tu nombre, que despertara para apoyarse en ti, pues tú habías escondido tu rostro de nosotros y nos habías dejado a merced de nuestras iniquidades.
Y aún dices: 'Soy inocente; ¡oh, sí, su cólera se ha alejado de mí!'. Pues aquí estoy para juzgarte, ya que dices: No he pecado.
Si la lepra se propaga por la piel y la recubre entera, de la cabeza a los pies, todo cuanto aparece a la vista del sacerdote,
Vosotros sois hijos del diablo y queréis cumplir los deseos de vuestro padre. Él fue homicida desde el principio y no se mantuvo en la verdad, pues no hay verdad en él. Cuando dice mentira, habla según su propia naturaleza, porque es mentiroso y padre de la mentira.
Nadie se engañe a sí mismo. Si alguno entre vosotros piensa que es sabio según la sabiduría de este mundo, que se haga necio para llegar a ser sabio.
Porque si alguno se imagina ser algo, siendo así que es nada, se engaña a sí mismo.
conflictos interminables, propios de personas obcecadas e ignorantes, que piensan que la religión es un negocio;
Los hombres malvados irán de mal en peor; engañarán y serán engañados.
Cumplid la palabra y no os contentéis sólo con escucharla, engañándoos a vosotros mismos.
El que cree que es religioso, pero no refrena su lengua, se engaña a sí mismo y su religiosidad no vale para nada.
Todos faltamos de muchas maneras. Si uno no falta en las palabras, es un hombre perfecto, capaz de refrenar también todo su cuerpo.
ése será el pago merecido por su injusticia; encuentran su felicidad en el placer de un día; hombres corrompidos e inmundos, se gozan en sus engaños mientras banquetean con vosotros;
Si decimos que no hemos pecado, le hacemos mentiroso, y su palabra no está en nosotros.
Si decimos que estamos unidos a él y andamos en tinieblas, mentimos y no practicamos la verdad;
El que afirma que le conoce, pero no guarda sus mandamientos, es un mentiroso y la verdad no está en él.
Si alguno dice que ama a Dios y odia a su hermano, es un mentiroso. El que no ama a su hermano, al que ve, no puede amar a Dios, al que no ve.
Me he alegrado mucho cuando han llegado los hermanos y han testificado que te mantienes firme en la verdad.