Desde los tiempos de Juan Bautista hasta ahora el reino de Dios sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.
1 Corintios 9:26 - Biblia Martin Nieto Yo no corro sin ton ni son, ni peleo como quien da golpes al aire, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el aire, Biblia Nueva Traducción Viviente Por eso yo corro cada paso con propósito. No solo doy golpes al aire. Biblia Católica (Latinoamericana) Así que no quiero correr sin preparación, ni boxear dando golpes al aire. La Biblia Textual 3a Edicion Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera lucho, no como golpeando el aire; Biblia Serafín de Ausejo 1975 En consecuencia, así es como corro yo, no como a la buena de Dios. Así es también como hago pugilato, no como dando golpes al aire; Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así que, yo de esta manera corro, no como a la ventura; de esta manera peleo, no como quien golpea el aire, |
Desde los tiempos de Juan Bautista hasta ahora el reino de Dios sufre violencia, y los violentos lo arrebatan.
'Esforzaos por entrar por la puerta estrecha, porque os digo que muchos intentarán entrar y no podrán.
Así también vosotros, si vuestra lengua no utiliza palabras claras, ¿cómo se entenderá lo que decís? Sería como hablar al aire.
Sabemos que si esta tienda en que habitamos en la tierra se destruye, tenemos otra casa, que es obra de Dios; una morada eterna en los cielos, no construida por mano de hombres.
Pero estamos seguros, y preferimos salir de este cuerpo para vivir junto al Señor.
Fui, impulsado por una revelación divina; y, en privado, expuse a los dirigentes el evangelio que predico a los paganos, para saber si estaba o no trabajando inútilmente.
Porque nuestra lucha no es contra gente de carne y hueso, sino contra los principados y potestades, contra los dominadores de este mundo tenebroso, contra los espíritus del mal, que moran en los espacios celestes.
con miras a lo cual me fatigo y lucho apoyado en la fuerza de Cristo, que obra poderosamente en mí.
Ésta es la causa de todos estos sufrimientos; pero no me avergüenzo, pues sé en quién he puesto mi confianza y estoy seguro de que él puede guardar hasta el último día lo que me ha encomendado.
El atleta no puede conseguir la victoria si no se atiene a las reglas del deporte.
He combatido el buen combate, he concluido mi carrera, he conservado la fe;
Precisamente por eso también nosotros, envueltos como estamos en una gran nube de testigos, debemos liberarnos de todo aquello que es un peso para nosotros y del pecado, que fácilmente nos seduce, y correr con perseverancia en la prueba que se nos propone,
Mientras sigue en vigor la promesa de entrar en su descanso, hay que tener mucho cuidado, no sea que alguno de vosotros no lo consiga.
A los presbíteros que hay entre vosotros los exhorto yo, presbítero también, testigo de los sufrimientos de Cristo y participante en la gloria que habrá de manifestarse en el futuro:
Por consiguiente, hermanos, esforzaos más y más por asegurar vuestra vocación y elección; de esta manera no tropezaréis jamás
(fue únicamente para instruir en el arte de la guerra a los que no habían conocido las guerras de antes).