Estén alerta y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil».
Mateo 6:13 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Y no nos dejes caer en tentación, sino líbranos del maligno”. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén. Biblia Nueva Traducción Viviente No permitas que cedamos ante la tentación, sino rescátanos del maligno. Biblia Católica (Latinoamericana) y no nos dejes caer en la tentación,
sino líbranos del Maligno. La Biblia Textual 3a Edicion Y no nos metas en prueba,° mas líbranos del mal.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 y no permitas que seamos tentados, sino líbranos del mal. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por siempre. Amén. |
Estén alerta y oren para que no caigan en tentación. El espíritu está dispuesto, pero el cuerpo es débil».
Enséñenles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.
Cuando ustedes digan “sí”, que sea realmente sí; y, cuando digan “no”, que sea no. Cualquier cosa de más proviene del maligno.
Ustedes no han sufrido ninguna tentación que no hayan sufrido otras personas. Pero Dios es fiel y no permitirá que ustedes sean tentados más allá de lo que puedan aguantar. Más bien, cuando llegue la tentación, él les dará también una salida para que puedan resistir.
Porque, si alabas a Dios con el espíritu, el que no es instruido no podrá decir «amén» a tu acción de gracias. No podrá hacerlo porque no entiende lo que dices.
Todas las promesas que ha hecho Dios se han cumplido por medio de Cristo. Así que por medio de Cristo decimos «amén» para la gloria de Dios.
Jesucristo dio su vida para que fuéramos perdonados por nuestros pecados. Así nos liberó de este mundo malvado. Esta fue la voluntad de nuestro Dios y Padre.
Nos contaron que ahora esperan que Jesús regrese del cielo. Dios fue quien resucitó a su Hijo, y su Hijo nos libra del castigo que vendrá sobre los pecadores.
Pero el Señor es fiel, y él les dará fuerzas. Él los protegerá a ustedes de todo mal.
Por tanto, al Rey eterno, inmortal, invisible, al único Dios, sea honor y gloria por los siglos de los siglos. Amén.
Practiquen el dominio propio y manténganse alerta. Su enemigo el diablo ronda como león rugiente, buscando a quién devorar.
Todo esto demuestra que el Señor sabe librar de la tentación a los que viven como Dios quiere. Pero también sabe castigar a los malvados, y lo hará cuando llegue el día del juicio.
El que vive pecando pertenece al diablo, porque el diablo ha estado pecando desde el principio. El Hijo de Dios fue enviado precisamente para destruir lo que hace el diablo.
y el que vive. Estuve muerto, pero ahora vivo por los siglos de los siglos. Yo tengo poder sobre la muerte y el infierno.
Después de esto oí que en el cielo una inmensa cantidad de personas decían con fuerte voz: «¡Aleluya! La salvación, la gloria y el poder son de nuestro Dios,
Entonces los veinticuatro líderes y los cuatro seres vivientes se arrodillaron y adoraron a Dios, que estaba sentado en el trono, y dijeron: «¡Amén, Aleluya!».
No tengas miedo de lo que estás por sufrir. Debes saber que el diablo meterá en la cárcel a algunos de ustedes. Lo hará para ponerlos a prueba; y tendrán que sufrir durante diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.
Él les secará toda lágrima de los ojos. Ya no habrá muerte, ni llanto ni lamento ni dolor. Porque las primeras cosas han dejado de existir».
Tú has obedecido mi mandato de confiar hasta el final. Por eso, yo te protegeré cuando llegue la hora de prueba que vendrá sobre el mundo entero. De esta manera serán probados los que viven en la tierra.
»Escribe al ángel de la iglesia de Laodicea: A mí me llaman el Amén, porque soy fiel y digo la verdad. Yo gobierno sobre la creación de Dios, y este es mi mensaje:
Y oí que todas las criaturas de la creación estaban cantando. Me refiero a las criaturas del cielo, de la tierra, de debajo de la tierra y del mar. Todas ellas cantaban: «¡Alabemos al que está sentado en el trono y al Cordero! ¡Que reciban la alabanza y la honra, la gloria y el poder, por siempre!».