Y todo el que pronuncie alguna palabra contra el Hijo del hombre será perdonado, pero el que dice ofensas contra el Espíritu Santo no tendrá perdón.
Mateo 12:31 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Por eso les digo que a todos se les podrá perdonar todo pecado y toda ofensa, pero la ofensa contra el Espíritu no se le perdonará a nadie. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu no les será perdonada. Biblia Nueva Traducción Viviente »Por eso les digo, cualquier pecado y blasfemia pueden ser perdonados, excepto la blasfemia contra el Espíritu Santo, que jamás será perdonada. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso yo les digo: Se perdonará a los hombres cualquier pecado y cualquier insulto contra Dios. Pero calumniar al Espíritu Santo es cosa que no tendrá perdón. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia serán perdonados° a los hombres, pero la blasfemia° contra el Espíritu no será perdonada.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso os digo: cualquier pecado y blasfemia se les perdonará a los hombres; pero la blasfemia contra el Espíritu no se les perdonará. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto os digo: Todo pecado y blasfemia será perdonado a los hombres; mas la blasfemia contra el Espíritu Santo no les será perdonada a los hombres. |
Y todo el que pronuncie alguna palabra contra el Hijo del hombre será perdonado, pero el que dice ofensas contra el Espíritu Santo no tendrá perdón.
»¡Tercos, duros de corazón y torpes de oídos! Ustedes son iguales que sus antepasados: ¡Siempre resisten al Espíritu Santo!
Si después de conocer la verdad pecamos tercamente, ya no hay sacrificio que perdone nuestros pecados.
¿Cuánto mayor castigo piensan ustedes que merece el que ha despreciado al Hijo de Dios? ¿Qué castigo recibirá el que ha rechazado la sangre de Cristo? Pues esa sangre es la del pacto por medio del cual había sido elegido por Dios. Quien así actúa ha insultado al Espíritu de Dios, quien nos ama, aunque no lo merezcamos.
Cuando creímos en Cristo, nuestro entendimiento recibió luz, recibimos un regalo especial de parte de Dios y entramos en compañerismo con el Espíritu Santo. Entendimos el buen mensaje de Dios y el poder que demostrará en el mundo en el cual viviremos después de la muerte. Así que es imposible que aquellos que han dejado de creer en Cristo renueven su arrepentimiento. Pues sería como volver a crucificar a Cristo, al Hijo de Dios, y exponerlo a la vergüenza pública.
Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.
Quizá haya algún hermano en la fe que esté cometiendo un pecado que no lleva a la muerte. Si alguno se da cuenta de esto, debe orar por aquel hermano, y Dios le dará vida. Me refiero a quien comete pecado que no lleva a la muerte. Hay pecado que sí lleva a la muerte, y en ese caso no digo que se ore por él.