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Hechos 9:41 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Él, tomándola de la mano, la levantó. Luego llamó a los creyentes y a las viudas, a quienes la presentó viva.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Y él, dándole la mano, la levantó; entonces, llamando a los santos y a las viudas, la presentó viva.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Él le dio la mano y la ayudó a levantarse. Después llamó a las viudas y a todos los creyentes, y la presentó viva.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Ella abrió los ojos, reconoció a Pedro y se sentó. El le dio la mano y la ayudó a levantarse; luego llamó a los santos y a las viudas y se la presentó viva.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y dándole la mano, la levantó; y llamando a los santos y a las viudas, la presentó viva.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Él le dio la mano y la levantó; llamó luego a los fieles y a las viudas y se la presentó vuelta a la vida.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Y él, dándole la mano, la levantó; y llamando a los santos y a las viudas, la presentó viva.

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Otras versiones



Hechos 9:41
15 Referencias Cruzadas  

Él se le acercó, la tomó de la mano y la ayudó a levantarse. Entonces se le quitó la fiebre y comenzó a servirles.


Cuando ya se acercaba a las puertas del pueblo, vio que sacaban de allí a un muerto. Era el único hijo de una mujer viuda. La acompañaba un grupo grande de la población.


El muerto se levantó y comenzó a hablar, y Jesús se lo entregó a su madre.


Al joven se lo llevaron vivo a su casa, para gran consuelo de todos.


Y, tomándolo por la mano derecha, lo levantó. Al instante los pies y los tobillos del hombre cobraron fuerza.


En aquellos días, al aumentar la cantidad de los discípulos, se quejaron los que hablaban griego contra los que hablaban hebreo. Decían que sus viudas eran desatendidas en la distribución diaria de los alimentos.


Entonces Ananías respondió: ―Señor, he oído decir que ese hombre ha causado mucho daño a los que creen en ti en Jerusalén.


Pedro, que estaba recorriendo toda la región, fue también a visitar a los creyentes que vivían en Lida.


Ayuda como es debido a las viudas que de verdad no tienen quien las apoye.


La viuda que no tiene quien la ayude, pues ha quedado sola, pone su confianza en Dios y no deja de orar de noche y de día suplicando por ayuda.