’Elohim está en medio de ella, no será conmovida, ’Elohim la ayudará al clarear la mañana.
Isaías 44:2 - La Biblia Textual 3a Edicion Así dice YHVH, Hacedor tuyo, Y el que te formó desde el seno materno, tu Ayudador: No temas, siervo mío Jacob, Tú, Jesurún,° mi escogido. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Así dice Jehová, Hacedor tuyo, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará: No temas, siervo mío Jacob, y tú, Jesurún, a quien yo escogí. Biblia Nueva Traducción Viviente El Señor que te hizo y que te ayuda, dice: “No tengas miedo, oh Jacob, siervo mío, mi amado Israel, mi elegido. Biblia Católica (Latinoamericana) Así habla Yavé, el que te hizo, tu socorro,
el que te formó desde el seno materno:
No teman, hijos de Jacob, mi servidor,
Israel a quien yo elegí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Así dice Yahveh, tu creador, tu formador desde el seno, que te ayuda: no temas, siervo mío Jacob, Yesurún, a quien elegí. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así dice Jehová, tu Hacedor, y el que te formó desde el vientre, el cual te ayudará: No temas, siervo mío Jacob, y tú, Jesurún, a quien yo escogí. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Yo soy Dios, tu creador; yo te formé desde antes que nacieras, y vengo en tu ayuda. »No tengas miedo, querido pueblo mío, tú eres mi fiel servidor, tú eres mi elegido. |
’Elohim está en medio de ella, no será conmovida, ’Elohim la ayudará al clarear la mañana.
Por ti he sido sustentado desde el vientre, Tú eres quien me sacó de las entrañas de mi madre, ¡De ti será mi alabanza perpetuamente!
¡Venid, inclinémonos y postrémonos, Arrodillémonos ante la presencia de YHVH, nuestro Hacedor!
Secándose las ramas, se quiebran; Vienen mujeres y las hacen arder. Porque es un pueblo insensato, Su Hacedor no se apiada, Su Creador no lo compadece.
No temas, porque Yo estoy contigo; No desmayes, porque Yo soy tu Dios; Te fortaleceré y siempre te ayudaré, Sí, Yo te sostendré con mi diestra victoriosa.°
No temas, oh gusanillo de Jacob, Oruga de Israel: Yo soy tu socorro, dice YHVH, Tu Redentor es el Santo de Israel.
Pero tú, oh Israel, siervo mío, Jacob, a quien he escogido, Simiente de Abraham, mi amigo;
Y ahora Jacob, así dice YHVH, el que te creó, El que te formó, oh Israel: No temas, porque Yo te redimí; te puse nombre, mío eres tú.
El pueblo que Yo he formado para mí mismo, Para que proclamara mi alabanza.
No temas, porque Yo estoy contigo; Del oriente traeré tu simiente,° Y del occidente te recogeré.
A todos los llamados en mi Nombre, A los que para gloria mía creé, A los que hice y formé.
Oh Jacob, acuérdate de esto, Porque eres mi siervo, Israel; Te he formado, mi siervo eres tú, Oh Israel, no serás olvidado por mí.
Así dice YHVH, tu Redentor, Y el que te formó desde el vientre: Yo soy YHVH, Creador de todas las cosas; Yo solo extendí los cielos, Asenté la tierra por mí mismo.°
Así dice YHVH, el Santo de Israel, su Formador: ¿Me pediréis cuenta de mis hijos, Me daréis órdenes de la obra de mis manos?
¡Oídme, costas, y atended, pueblos lejanos! YHVH me llamó desde el vientre; Desde las entrañas de mi madre tuvo en memoria mi nombre.
Ahora pues, YHVH, que me formó desde el vientre como siervo suyo para que le trajera a Jacob y le reuniera a Israel (tanto así me ha honrado YHVH, y mi Dios ha sido mi fortaleza),
Antes que te formara en el vientre te conocí, y antes que salieras de la matriz te consagré, te di por profeta a las naciones.
Tú pues, siervo mío Jacob, No temas, dice YHVH, Ni te atemorices, Israel; Porque he aquí Yo te salvo del país remoto, Y a tu descendencia de la tierra de cautividad; Jacob volverá, descansará y vivirá tranquilo, Y no habrá quien lo espante.
No temáis manada pequeña,° porque vuestro Padre se complació en daros el reino.°
y a los que predestinó, a éstos también llamó; y a los que llamó, a éstos también declaró justos; y a los que declaró justos, a éstos también glorificó.
según nos escogió en Él antes de la fundación del mundo, para que fuéramos santos y sin mancha delante de Él;
Pero engordó Jesurún° y tiró coces (Engordaste, te cebaste y te pusiste rollizo), Y abandonó al Dios que lo había hecho, Menospreció la Roca de su salvación.
Ninguno hay como el Dios de Jesurún, Que cabalga sobre los cielos en tu auxilio, Y en su majestad sobre las nubes.
Él ha llegado a ser Rey en Jesurún, Cuando las cabezas del pueblo fueron reunidas, Juntamente con las tribus de Israel.
Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia, para que obtengamos misericordia y hallemos gracia para el oportuno socorro.