Lucas 10:11 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia11 “Hasta el polvo de esta ciudad, que se pegó a nuestros pies, lo vamos a sacudir en señal de protesta. No obstante, ustedes deben saber que el reino de Dios se ha acercado”. Féach an chaibidilTuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 196011 Aun el polvo de vuestra ciudad, que se ha pegado a nuestros pies, lo sacudimos contra vosotros. Pero esto sabed, que el reino de Dios se ha acercado a vosotros. Féach an chaibidilBiblia Nueva Traducción Viviente11 “Nos limpiamos de los pies hasta el polvo de su ciudad para mostrar que los abandonamos a su suerte. Y sepan esto: ¡el reino de Dios está cerca!”. Féach an chaibidilBiblia Católica (Latinoamericana)11 Nos sacudimos y les dejamos hasta el polvo de su ciudad que se ha pegado a nuestros pies. Con todo, sépanlo bien: el Reino de Dios ha venido a ustedes. Féach an chaibidilLa Biblia Textual 3a Edicion11 Os sacudimos° aun el polvo de vuestra ciudad que se nos pegó a los pies; pero sabed esto: El reino de Dios se ha acercado.°° Féach an chaibidilBiblia Serafín de Ausejo 197511 'Hasta el polvo de vuestra ciudad que se nos pegó a los pies, lo sacudimos sobre vosotros; pero sabedlo bien: ¡el reino de Dios está cerca!'. Féach an chaibidilBiblia Reina Valera Gómez (2023)11 Aun el polvo que se nos ha pegado de vuestra ciudad, sacudimos contra vosotros: Pero esto sabed, que el reino de Dios se ha acercado a vosotros. Féach an chaibidil |
Entonces, Pablo y Bernabé que hablaban con mucha sinceridad, dijeron a los judíos: – Era necesario que la Palabra de Dios se les predicara primero a ustedes, pero como ustedes no están haciendo caso, critican y no se consideran dignos de tener la vida eterna, entonces ahora iremos a los que no son judíos.
El Hijo refleja perfecta y constantemente la brillante belleza de la gloria, la esencia de lo que Dios es, la evidencia de la realidad sustancial de Dios, y sustenta todas las cosas con su poderosa palabra. Después de haber hecho la purificación de los pecados, tomó su lugar de honor y se sentó a la derecha de la majestad de Dios en los altos cielos.