Génesis 33 - Nueva Biblia Española (1975)1 Alzó Jacob la vista y vio a Esaú que se acercaba con sus cuatrocientos hombres; repartió sus hijos entre Lía, Raquel y las dos criadas; 2 puso delante a las criadas con sus hijos, detrás a Lía con los suyos y finalmente a Raquel con José. 3 El se adelantó y se fue postrando en tierra siete veces hasta alcanzar a su hermano. 4 Esaú corrió a recibirlo, lo abrazó, se le echó al cuello y lo besó llorando. 5 Después, alzando la vista, vio a las mujeres y a los hijos, y preguntó: ¿Quiénes son éstos? Respondió: Son los hijos que Dios ha regalado a tu siervo. 6 Se acercaron las criadas con sus hijos y se postraron, 7 después se acercó Lía con los suyos y se postraron, finalmente se acercó José con Raquel y se postraron. 8 Volvió a preguntar: Y ¿qué significa toda esta caravana que he ido encontrando? Contestó: Es para alcanzar el favor de mi señor. 9 Replicó Esaú: Yo tengo bastante, hermano mío; quédate con lo tuyo. 10 Jacob insistió: De ninguna manera; si he alcanzado tu favor, acepta estos dones de mi mano, pues he visto tu rostro benévolo y ha sido como ver el rostro de Dios. 11 Acepta estos dones que te he traído, pues me los ha regalado Dios y son todos míos. Y como insistía, Esaú aceptó. 12 Después propuso: Vamos a ponernos en marcha, y yo iré a tu lado. 13 Respondió Jacob: Mi señor sabe que los niños son débiles, que las ovejas y vacas están criando, y si les hago caminar una jornada, se me morirá todo el rebaño; 14 pase mi señor delante de su siervo, y yo seguiré despacio, al paso de los niños y al paso de la caravana que va delante; alcanzaré a mi señor en Seír. 15 Esaú dijo: Te daré alguno de mis hombres como escolta. Jacob rehusó: ¿Para qué, si he alcanzado el favor de mi señor? 16 Aquel día Esaú prosiguió su marcha hacia Seír. 17 Jacob marchó a Sucot, donde se construyó una casa e hizo establos para el ganado; por eso el lugar se llama Sucot. 18 Jacob llegó sano y salvo a Siquén, en tierra de Canaán, proveniente de Padán Aram, y acampó fuera, frente a la ciudad. 19 Y el terreno donde plantó las tiendas se lo compró a los hijos de Jamor, antepasado de Siquén, por cien monedas. 20 Allí levantó un altar y lo dedicó al Dios de Israel. |
Luis Alonso Schökel y Juan Mateos, 1975 ©, Editada por Ediciones Cristiandad.